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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

El Murdoch español

La comisión que estos días investiga en Reino Unido los escándalos perpetrados por los medios sensacionalistas del magnate Murdoch (en cuyo Consejo de Administración se sienta, por cierto, el expresidente Aznar) me ha hecho recordar el nombre de Rodolfo Ruiz Martínez. Muchos quizá no sepan quién es este hombre, pero su labor como comisario de Vallecas permitió dar los primeros y fundamentales primeros pasos para esclarecer los atroces atentados del 11-M.

Este señor, al que no conozco en persona, podría haber sido retratado en los medios igual que lo fueron los bomberos del 11-S. Sin embargo, fue la pieza de caza más preciada por los secuaces del sensacionalismo patrio, imitadores de los tabloides británicos ahora puestos en tela de juicio. La cacería, basada en la reiterada mentira de la conspiración, ese mantra para vender más periódicos y captar más oyentes al que nos sometieron durante años todas las mañanas, no se limitó solo a un acoso profesional, sino que se adentró de la forma más repugnante en el ámbito personal por parte de aquellos que utilizan sus plumas y micrófonos como guadañas.

La esposa de Rodolfo no pudo aguantar esa larga campaña de insidias y ataques diarios, y acabó suicidándose a finales de 2008. La historia es dura, pero real. ¿Nos atrevemos a abrir aquí una comisión para depurar responsabilidades? Ah no, que esa cacería contó con el beneplácito del partido que va a gobernar ahora.

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