Recorte de privilegios
Más transparencia, pide Eduardo Calavia el pasado día 11 en esta sección de Cartas al director, sobre las cuentas de la total y absolutamente opaca Iglesia católica.
A lo que yo añadiría además, como urgente, algún recorte también en la financiación de sus presupuestos en tanto llega el día de denuncia del concordato preconstitucional que nos ata a ella. Al menos para que esa madre que se dedica estos días a recaudar dinero para la investigadora que estudia el remedio a la diabetes de su hija por falta de fondos públicos, pueda sentirse mejor. Algo que la Iglesia, tan celosa de salvar almas y vidas incipientes, verá sin duda alguna con buenos ojos, aunque monseñor Cañizares, en recientes manifestaciones a la prensa, siga confiando en la oración como la gran solución al terrible problema del desempleo y la crisis económica.
¿Qué tal si sustituimos su casilla en la declaración de la renta por otra dedicada a la investigación?