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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Soberanía del pueblo

Durante los 28 días de golpe de Estado en Honduras he podido hablar en varias ocasiones con mi amigo Rafael Alegría. En ellas me ha transmitido la importancia de la solidaridad internacional que parece día a día ir mermando. Pero este pasado sábado, por seis horas estuvo preso en una celda, junto con 45 personas más, por no haber respetado el toque de queda. "Esa medida", dijo Rafael a la policía, "es ilegal y no la podemos aceptar".

Campesino, hijo de campesinos y activista desde los 17 años por los derechos campesinos, Rafael fue una pieza fundamental en la génesis del movimiento social mundial La Vía Campesina, del que fue su coordinador internacional durante varios años. La Vía Campesina, que agrupa a unos 200 millones de campesinas y campesinos, defiende el paradigma de la soberanía alimentaria como una alternativa a la actual agricultura diseñada como negocio de unos pocos y hambre para muchos. Rafael, con sus compañeras y compañeros, ha desafiado a las grandes corporaciones, ha participado en toma de tierras para denunciar los monocultivos que colonizan el campo o, junto a otras muchas acciones, se ha enfrentado en Cancún y en Hong Kong a la Organización Mundial del Comercio, que teje los hilos de todos estos desmanes.

Por los mismos motivos Rafael está al frente de la resistencia contra el golpe de Estado en su país: por la soberanía del pueblo hondureño hoy secuestrada. Por eso se le detiene: para desarticular las movilizaciones populares.

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Rafael resiste, pero ¿se rindió la comunidad internacional.

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