_
_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

El Supremo no transige

No era fácil imaginar una situación en la que el Consejo General del Poder Judicial tuviera que ser llamado al orden por el Tribunal Supremo por el manifiesto incumplimiento de una sentencia. O peor todavía: por hacer el paripé de cumplirla, buscándole las vueltas para eludir hacer lo ordenado por el mandato judicial. Constituye, así, todo un escándalo que el Consejo -controlado por la mayoría de vocales afines al PP- haya pretendido saltarse a la torera lo estipulado expresamente por el Supremo en el caso del nombramiento del magistrado Javier Gómez Bermúdez como presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

El primer nombramiento de Gómez Bermúdez al frente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, a la que fue promovido en julio de 2004, fue anulado por la Sala Tercera del Supremo hace apenas seis meses por falta de motivación. Y ahora acaba de serlo el segundo si cabe por una razón más grave: haberse llevado a efecto con una motivación ficticia y discriminatoria para con el resto de los candidatos, mediante el subterfugio de inflar hasta seis folios el historial profesional de Gómez Bermúdez y minusvalorar hasta el ridículo el de los otros, como el del juez Garzón, o el de magistrado con larga experiencia Félix Alfonso Guevara. No es extraño que los ocho vocales de la minoría se desmarcaran de la propuesta de nombramiento por "estar viciada de origen".

El portavoz del CGPJ ha pretendido quitar hierro al correctivo atribuyéndolo a meros "vicios de procedimiento". No son cuestiones de forma, muy al contrario. Son de fondo, y el Supremo ordena respetarlas e indica que tienen que ver con la igualdad y la no discriminación en la valoración de los méritos de los candidatos. El sector conservador del Consejo tiene que poner en claro sin trampa alguna, si es que insiste en proponer a Gómez Bermúdez, cuáles son los méritos que le hacen acreedor del puesto frente a candidatos que están muy por delante en el escalafón y que acreditan una larga experiencia en ese tribunal instruyendo o enjuiciando causas por terrorismo. Es de esperar que a la tercera ocasión lo haga.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_