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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

ZP, la izquierda y la derecha

La actual crisis económica ha mostrado la desnudez de la socialdemocracia, no solamente ya de la española sino también de la europea. El modelo de desarrollo capitalista implantado en Europa tras la II Guerra Mundial -el llamado Estado de bienestar- está en crisis; ese modelo fue una creación de la socialdemocracia europea, aunque, es verdad, los demócrata-cristianos y liberales de la época también ayudaron. En realidad, su creación debe mucho al miedo a la extensión de la revolución comunista por las tierras de Europa occidental en el contexto de guerra fría.

El dumping social que representó la globalización comenzó a erosionar los principios en que se basaba el citado modelo. Al mismo tiempo, los paradigmas neoliberales fueron asentándose en los discursos de los Gobiernos. Ante este panorama, la socialdemocracia europea no supo, o no quiso, elaborar políticas alternativas y acabó aceptando los presupuestos neoliberales. Era el triunfo del pensamiento único; el sueño de algunos comenzaba a hacerse realidad: las ideologías se disolvían en un magma irreconocible en el que todo parecía lo mismo.

La crisis económica que comenzó en 2008 no hizo sino afianzar la tendencia ya señalada. Todos los Gobiernos salieron en defensa de sus sistemas financieros -la banca y los fondos de inversión también tienen su Estado de bienestar- y cuando el déficit provocado por la crisis se disparó esos mismos actores se volvieron contra la mano que antes los protegía. ¿Y cómo solucionar el déficit? La receta ya la había escrito el neoliberalismo. La respuesta era el adelgazamiento del Estado de bienestar: jubilaciones más tardías, pensiones más escuetas, despidos más fáciles y baratos... ¿Y respecto al capital? Nadie sabe, nadie contesta.

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El problema es que la izquierda no tiene una política propia para salir de la crisis. El ejemplo es Zapatero. Ha renunciado a su discurso social y ha aplicado las medidas que el neoliberalismo ha dictado. ¿Qué debería hacer? ¿Continuar en el poder y permitir que sea la socialdemocracia la que aplique políticas de derechas y neoliberales, o dejar que sea la derecha la que administre las soluciones propuestas -que son las suyas- asumiendo el coste político y social de las mismas? ¿Por qué la izquierda debe aplicar políticas de derecha? ¿Es que ya no hay diferencias.

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