Una ecuación más que posible
Me alegra ver publicado un análisis de la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, sobre la Ley de Financiación Autonómica. Me alegra porque en este periódico cualquiera puede decir su opinión. Pero lo que no se puede es hacer partidismo. Dice que "las sociedades democráticas más sólidas son las que elaboran sus leyes desde el consenso". Sin embargo, rechaza que el actual Gobierno se haya basado en esta premisa.
¿Acaso el presidente del Gobierno no se reunió con cada uno de los presidentes de las diferentes comunidades autónomas? ¿Y no llegó a un acuerdo con todos ellos? Se hicieron las cosas de manera democrática; nada que reprochar pues. De igual forma, me gustaría saber de qué servicios sociales prescindiría la portavoz del PP, ya que, si hay que mantener las prestaciones en "sanidad, educación, servicios sociales, justicia o seguridad, entre otras", ¿de dónde recortaría gastos?
Un buen modelo de financiación pasa por un gran acuerdo nacional, que es lo que se ha hecho, ni más ni menos. Claro que los ciudadanos son iguales ante la ley, pero ¿no es verdad que los catalanes llevamos muchos años pagando más impuestos y recibiendo menos dinero que el resto de comunidades.
