_
_
_
_
_
Análisis:EL ACENTO
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Los juguetes de la muerte

El furor serán los videojuegos y las playstation. Pero los nuevos juguetes y entretenimientos -ya no sólo de la infancia y adolescencia- enlazan con un fondo oscuro del ser humano, de preferencia, varón: la violencia. Las armas fascinan a los niños de todas las edades. En Europa parece que hay la distancia crítica suficiente para no confundir sueños con realidades. Pero en algunos países con unos índices de violencia ciudadana muy altos como México, con cerca de 40 homicidios por 100.000 habitantes y año -España, menos de tres-, hay un fuerte movimiento político y popular contra los juguetes bélicos y la imitación de armas cortas.

El congresista Otón Cuevas Córdova, del izquierdista PRD y padre de dos hijas, presentó la semana pasada un proyecto de ley que prohíbe la fabricación, venta e importación de ese tipo de juguetes. En 2002 ya se aprobó una ley que ilegalizaba el comercio con juguetes de guerra o delincuencia muy parecidos al original, pero la norma no preveía sanción, lo que era como fruncir el ceño a guisa de castigo. Cuevas Córdova se ha cuidado de introducir multas para endurecer la medida.

Réplicas muy bien hechas del rifle de asalto norteamericano AK-47, pistolas Luger alemanas y Berettas como las de James Bond se venden en mercadillos y por la ambulancia callejera. Tanto que no pocas veces los delincuentes preferían las armas de imitación a las auténticas, por su precio y porque, de ser cogidos, la pena sería siempre menor.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Los Ángeles ya prohibió la venta de toda clase de juguetes para delincuentes en 1987.

La medida no se generalizó en el país porque son los Estados y las municipalidades los que tienen las competencias sobre esa clase de actividades.

Nadie sabe exactamente qué influencia tiene sobre el niño, luego adulto, haber crecido rodeado de armas de fuego de imitación tan realista. Tal vez la peor consecuencia sea la banalización del asesinato; tomarlo por un juego sin más trascendencia; como si los muertos reales fueran a levantarse del mismo modo que se incorporaban los muertos de mentira al finalizar las fases del juego.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_