Contra el maltrato animal

La actuación policial contra los antitaurinos de Gandía ha sido vergonzosa. Quienes se manifiestan contra la crueldad con los animales son gente pacífica que desean un mundo más en armonía y sin crueldad en las fiestas. Por muy tradicionales que sean esos espectáculos taurinos el toro es víctima de múltiples estocadas, banderillas y demás instrumentos cortantes.

El nuevo alcalde podría haber sido más cívico y más ético. En lugar de imponer de nuevo corridas de toros, después de 25 años sin ellas, debería tener más respeto por la mayoría de ciudadanos que rechazan estos crueles festejos.

No sé que intereses tiene el Partido Popular en este tema, ya que donde entra lo primero que hace es apoyar la tauromaquia. A Dolores de Cospedal, a pesar de todos los problemas que tiene en Castilla-La Mancha, le ha faltado tiempo para declarar Bien de Interés Cultural las corridas de toros.

Y qué decir de la Junta de Castilla y León, que también ha declarado de Interés Cultural al Toro de La Vega, festejo que un año más, para vergüenza de todos, se repetirá con un pobre toro que será alanceado por una caterva de energúmenos, sin que en este país nuestro exista un político que tenga la decencia de prohibirlo.