El 85% de los trabajadores de comedores escolares se une a la huelga
Los sindicatos convocantes de la tercera huelga en el sector de los comedores escolares en lo que va de curso (ELA, CC OO, UGT y LAB) calificaron ayer de éxito la iniciativa, al lograr la adhesión del 85% de la plantilla de los 460 centros afectados, más de 4.200 trabajadores.
El sector, que está sin convenio desde junio de 2008, reclama la equiparación salarial al del personal no docente, lo que supondría una subida lineal del 5%. Es decir, de los 5.000 empleos del sector, menos de 500 están adscritos al Departamento de Educación, mientras que el resto son monitores de subcontratas que trabajan mayoritariamente a tiempo parcial y con unas condiciones salariales en torno al 5% inferiores.
La subida que demandan los sindicatos "es inalcanzable" en opinión de la consejera de Educación, Isabel Celaa. Asi lo recalcó en una comparecencia parlamentaria tras la anterior huelga de noviembre, después de preguntarse en voz alta en el hemiciclo de dónde va a sacar el Gobierno ese dinero. El coste actual de los comedores escolares asciende a 60 millones de euros, de los cuales Educación paga el 72%.
Álava se queda atrás
La repercusión de la huelga alcanzó al 90% de la plantilla en Vizcaya y Guipúzcoa, mientras que en Álava se quedó en el 70%. En el anterior curso, el 2008-2009, los sindicatos convocaron otras cinco huelgas similares en protesta por la situación salarial de los monitores de las empresas subcontratadas que atienden los comedores.
"El Gobierno vasco y los representantes del sector se deberían sentar a negociar el convenio: es hora de dejarse de juegos y tomárselo en serio", citaron los sindicatos convocantes tras las concentraciones que realizaron durante la mañana de ayer ante la sede del Gobierno vasco en Bilbao, y en el Boulevard de San Sebastián. "Nuestro objetivo es conseguir una negociación seria y real" y para ello "estamos dispuestos a sentarnos en cualquier momento, y esperamos que la responsabilidad que se nos exige desde el Gobierno y la patronal, la tengan ellos", apuntaron.
Tras reconocer la extorsión que ese tipo de huelgas produce en los usuarios subrayaron: "Somos los primeros interesados en dar el mejor servicio posible".
