Agirre, Bilbao y Olano coordinan su plante al consejero de Economía
Sea cuestión de fondo o de formas, ni Xabier Agirre, ni Markel Olano, ni José Luis Bilbao, diputados generales de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, respectivamente, acudirán el lunes a la reunión con cinco consejeros del Gobierno y con Eudel a la que les convocó el martes por carta el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre. En una respuesta milimétricamente coordinada -las diputaciones de Vizcaya y Álava incluso emitieron comunicados idénticos- los tres anunciaron ayer por separado que, "por lealtad institucional", enviarán a sus respectivos diputados forales de Hacienda. Los diputados generales consideran que si se requiere su presencia en una reunión, a ella debe acudir también el lehendakari.
En el pasado, los tres máximos responsables de las diputaciones han tenido como interlocutora habitual a la vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia, a su vez consejera de Hacienda. Ese hábito parece quebrar ahora, al no existir el cargo de vicepresidente del Gobierno. "A convocatorias del lehendakari, asiste el diputado general", pero para la de "un consejero" es suficiente con "un representante de la Diputación de Guipúzcoa", que ésta decidirá según las cuestiones a tratar, dijo el diputado portavoz de la Diputación de Guipúzcoa, Eneko Goia.
"No subordinación"
El gobierno foral guipuzcoano fue el más crudo en su respuesta: "Quiero trasladar un mensaje clarísimo al lehendakari, Patxi López: que la lealtad y el respeto institucional al que tantas veces alude y solicita de las diputaciones forales es un respeto y una lealtad de doble dirección, que se produce en términos de colaboración y no en términos de subordinación"
añadió. No se puede actuar, señaló al lehendakari, "pensando que se está en una posición preeminente y que el otro está en una posición subordinada". Goya sugirió que el Gobierno perseguiría con la reunión "escenificaciones extrañas".
Aunque en un tono más mesurado, la nota de las diputaciones alavesa y vizcaína deja también traslucir el malestar causado por la convocatoria de Aguirre. La iniciativa, señalan ambas, es "positiva"; sin embargo, y en los mismos términos, encuentran "complicado establecer una reunión como la propuesta sin ajustar previamente las agendas de quienes se pretende asistan a la misma". Como Olano, entienden además que "una cumbre institucional como la pretendida debiera contar con la presencia del lehendakari". El comunicado de Agirre y Bilbao añade que gran parte de las materias para tratar tienen un foro propio: el Consejo Vasco de Finanzas.
