¿Desafecto Guggenheim?
El lehendakari y varios de sus consejeros han recibido en las últimas horas un argumentario encaminado a trasladar a los medios de comunicación la idea compartida de que el Gobierno vasco no siente desafecto alguno hacia el Guggenheim. El rechazo al proyecto de la Diputación, el propósito de llevar a Urdaibai otra iniciativa cultural sin relación alguna con el Guggenheim y las valoraciones de la consejera de Cultura sobre el convenio a revisar en 2014 con el museo de Bilbao han trasmitido una inquietante sensación de que el Gobierno López no tiene química con una marca artística asociada indisolublemente ya a Euskadi.
En Ajuria-Enea son conscientes de ese pálpito social "que en absoluto se corresponde con la realidad" y han reaccionado. El argumentario es la respuesta del Ejecutivo a una política de comunicación "que no se ha hecho bien" porque el cruce de mensajes ha dado una sensación "equivocada", según reconocen desde el Gobierno. "Nos vamos a centrar en renovar el convenio y en tratar de mejorarlo", aseguran.