Ea recupera su escuela
El empeño del municipio vizcaíno ha logrado reabrir un centro de enseñanza primaria después de 15 años - Cuenta con ocho alumnos
En los últimos 15 años los niños de Ea (Vizcaya), con poco más de 800 habitantes, tenían que salir del pueblo para ir a clase. El Ayuntamiento y los vecinos se empeñaron en que el pueblo volviera a tener escuela para mejorar la calidad de vida de los más pequeños y sus familias, fijar la población y, en definitiva, tener más vida. Y han conseguido su objetivo: la escuela pública Haizeder ya funciona con 8 alumnos en sus aulas a cargo de dos profesores.
La escuela está ubicada en el barrio de Natxitua, en el mismo edificio que ocupó un centro de enseñanza abandonado hace años. Convertirlo en la nueva escuela ha requerido la inversión de 1.200.000 euros, de los que las arcas municipales aportaron 950.000, y cerca de cinco años de gestiones ante el Departamento de Educación.
El próximo curso esta prevista la asistencia de 15 niños, de dos a cinco años
La buena acogida de la 'haurreskola' abierta en 2004 impulsó la idea
Los alumnos de Haizeder tienen entre dos y cuatro años. El Ayuntamiento espera que el próximo curso la matrícula crezca hasta los 13 niños, y se amplíe la enseñanza a los cinco años. La vieja escuela de Natxitua ha sido reformada y acondicionada. Consta de tres plantas, en las que se reparten un aula para los niños de dos a cuatro años, otra para los niños de cinco y seis años, un aula de psicomotricidad, sala de profesores, comedor y cocina y otras instalaciones auxiliares.
La reapertura de la escuela de enseñanza primaria se sustenta sobre la experiencia de la haurreskola (escuela infantil). Las familias de Ea no contaban con guardería en el municipio. La demanda de un centro para niños menores de tres años fue recogida por el Ayuntamiento y la Haurreskola Loradi abrió sus puertas en 2004 en unas instalaciones cedidas por la residencia Lagun Etxea, acondicionadas para acoger a los niños con una inversión de 6.000 euros.
La oferta de escolarización en la primera etapa de la vida se completó con un programa de subvenciones para las familias. Algo más del 40% de la cuota que debe pagar cada alumno es costeado por el Ayuntamiento (unos 80 euros al año).
La buena acogida de la haurreskola impulsó la recuperación de la escuela pública de enseñanza primaria. La petición oficial se comunicó al Departamento vasco de Educación en octubre de 2005. El camino hasta llegar a la inauguración oficial del centro el pasado fin de semana ha sido laborioso. Finalmente, en febrero del año pasado Educación dio luz verde al proyecto de rehabilitar las viejas escuelas para volver a impartir enseñanza en EA.
Las obras comenzaron en la primavera pasada. El edificio no estuvo listo para el inicio del curso en septiembre, pero los niños empezaron las clases en un local provisional. A primeros de febrero estrenaron la escuela y para celebrarlo el pasado fin de semana plantaron flores y un roble en el jardín.
