El Gobierno aspira a reducir en tres años el 80% del papel que utiliza

Llegará un día en el que la relación administrativa entre las instituciones y los ciudadanos será casi en su totalidad telemática. El proceso es irreversible y en Euskadi está más avanzado que en otras comunidades. Como reflejo, el archivo digital del Gobierno vasco alberga ya más de dos millones de documentos. El doble que a finales de 2010 y apenas la mitad de los que se esperan tener almacenados para finales del presente año. Un crecimiento exponencial con el que se espera reducir, en solo un trienio, hasta un 80% del papel que utiliza el Ejecutivo autónomo en sus procedimientos.

"Tender a la teletramitación es el objetivo. Que todo lo que entre en la Administración sea electrónico, al igual que su tramitación, aunque luego pueda salir en papel si así lo desea el ciudadano", explican desde el Gobierno. En noviembre ya se llevó a cabo una experiencia piloto en el servicio de atención ciudadana Zuzenean, que demostró que "la digitalización de documentos no impacta en una merma de la calidad o en una demora". El próximo reto llegará en junio, cuando está previsto aprobar el decreto de tramitación electrónica que permitirá "destruir papel tras su digitalización". Los nuevos documentos tendrán idéntica validez legal.

El objetivo es que todo lo que entre en la Administración sea electrónico

Para el último trimestre del presente año, además, está previsto que dejen de tramitarse en papel las solicitudes de ayudas a familias y las inscripciones de Etxebide, que abarcan más de la mitad de los documentos que entran en las bases del Ejecutivo autónomo. También se ha digitalizado ya todo el registro de fundaciones y está previsto hacer lo propio con los otros once que existen "antes de que acabe la legislatura". Asimismo, en breve se espera que se puedan teletramitar las subvenciones y los asuntos contables.

Las ventajas son numerosas. Al ahorro económico derivado de la reducción del gasto en papel se suma la inmediatez de las gestiones. "La pérdida de 48 horas que a día de hoy se asume por el envío de los documentos a través del correo desaparecerá", aseguran en el Gobierno, donde también garantizan que "no se perderán puestos de trabajo" con la digitalización. "Al personal que ahora se encarga de la recogida de archivos y de su envío se le reorientará hacia la atención al público, lo que a su vez permitirá reducir aún más los tiempos de espera", explican.

La modernización se enmarca en el denominado Plan de Innovación Pública del Gobierno vasco, que absorberá 108 millones de euros hasta 2013 para transformar la actual Administración basada en el papel a otra que tenga su eje en las nuevas tecnologías. No conllevará, sin embargo, la desaparición del almacenamiento tradicional. Así se explica la inversión de otros 15 millones que el Ejecutivo realizó para inaugurar el pasado mes de octubre el nuevo archivo general de Gamarra, en Vitoria, donde se guardan 47 kilómetros lineales de papel. "De los documentos históricos solo se copiarán digitalmente los de interés general para evitar su deterioro con la manipulación. El resto se conservarán en exclusiva como hasta ahora".