El PNV se queda solo al negar su apoyo a la investigación parlamentaria
Egibar echa un capote a los militantes de su partido acusados
El decidido discurso inicial del PNV ante los casos de supuesta corrupción y espionaje que le afectan de lleno en Álava (los casos De Miguel y Telleria), incluida su disposición a que los investigara el Parlamento, así como las reiteradas y aún infructuosas peticiones a los imputados para que entreguen el carné del partido, quedaron en casi nada ayer. Cuando llegó la hora de la verdad, la votación en la Cámara para constituir la comisión de investigación, el PNV evitó respaldarla y tampoco reiteró en sede parlamentaria exigencias hechas por otras voces del partido fuera de ella.
El grupo que encabeza Joseba Egibar no varió de postura, pese a la evidencia de que se quedaba solo -"repiense" le recomendó el portavoz de UPyD, Gorka Maneiro-, pues incluso sus socios en el anterior Gobierno avalan la investigación. Uno de ellos, EA, incluso la dirigirá.
Egibar: "Ustedes ya han matado civil y políticamente a los imputados"
Egibar rechazó la ocasión que el socialista Óscar Rodríguez le brindó hasta última hora, ya desde la misma tribuna, para una transacción que sumase al PNV al consenso general. Los peneuvistas mantuvieron su enmienda, que pretendía supeditar la investigación parlamentaria a la judicial y que un eventual archivo en esta última instancia acarrease la suspensión de toda acción en el ámbito parlamentario. Respecto a ninguna de las otras comisiones de este tipo habidas en la Cámara ha puesto el PNV, ni ningún otro grupo, tal condición, resaltó el popular Carmelo Barrio.
Esta será la segunda legislatura consecutiva en que la Cámara tenga abiertas a la vez dos comisiones de investigación, como ocurrió en el anterior mandato con los casos Guggenheim y Balenciaga. Como entonces, las dos atuales atañen al anterior Gobierno, en concreto a departamentos bajo gestión del PNV: la del caso Margüello ya en marcha y la que determinará las responsabilidades políticas por supuestas irregularidades que pudieran cometer cargos del último Gobierno de Ibarretxe relacionados con los casos De Miguel y Telleria, que instruye un juzgado de Vitoria. Los departamentos concernidos son Cultura -supuestos contratos irregulares-, Industria -contrataciones de la red de parques tecnológicos- e Interior -supuesto espionaje cometido por dos ertzainas que entregaban sus datos al ex dirigente peneuvista Aitor Telleria-. Queda además la derivada de unas recalificaciones de terrenos en el término alavés de Zambrana.
Egibar ejerció ayer como portavoz en el debate, muestra de la importancia que el PNV concede a esta cuestión. El portavoz peneuvista rechazó el ofrecimiento de Rodríguez para sumarse al acuerdo, tanto incorporando dos de los tres puntos de su enmienda como recordando pasadas declaraciones públicas de líderes peneuvistas o el voto favorable del PNV en las Juntas Generales de Álava a una investigación vinculada al caso De Miguel. No hubo posibilidad: "Ustedes ya han juzgado y condenado", rechazó Egibar en referencia a socialistas y populares.
Para el portavoz del PNV, a los imputados "se les ha matado ya civil y políticamente" y la comisión obedece a "intereses electorales". El PSE "ya tiene las conclusiones escritas, sólo les falta pasarlas a limpio", abundó.
Un plan para el billete único
Todos los grupos apoyaron ayer en el Parlamento una propuesta que reclama al Gobierno que presente en 2011 un plan para implantar una tarjeta única de pago que sirva para cualquier transporte público de Euskadi.
La iniciativa se transaccionó sobre una proposición original de Aralar en la que, además de reclamar al Gobierno dicho plan, solicita que sea consensuado con Ayuntamientos, Diputaciones y las entidades estatales competentes en la materia, "teniendo en cuenta las experiencias positivas de iniciativas de billete único ya existentes".
La propuesta aprobada reclama también al Ejecutivo que dicho plan detalle los plazos para poner en marcha el billete único, las asignaciones presupuestarias correspondientes, el sistema de bonificaciones y "los pasos a seguir para lograr una integración tarifaria".
La Cámara pide igualmente al Gobierno que analice las posibiidades de ampliar la tarjeta única a los viajes en transporte público a las comunidades autónomas limítrofes. Todos los grupos se congratularon por el acuerdo, aunque el representante de Aralar Dani Maeztu recordó que estas propuestas ya figuraban en el Plan Director del Transporte de 2002 y ocho años después todavía no existe una tarjeta única, informa Efe.
Maribel Vaquero, del PNV, reconoció que, aunque desde 2003 se han dado pasos en este sentido, han resultado insuficientes. El socialista Txarli Prieto argumentó que un pase único mejorará la calidad de vida, reducirá el impacto medioambiental y servirá para amortizar los transportes públicos, que "tanto dinero" cuestan.
Desde las filas populares, Borja Sémper defendió el atractivo del billete único para los usuarios, aunque reconoció que su implantación "no va a ser fácil" al estar implicadas diversas Administraciones.
