El Parlamento reconoce a Ramón Rubial al acoger una exposición sobre su figura

Ramón Rubial, Lehendakari: la memoria rescatada de Euskadi, la exposición organizada el año pasado por la Fundación que lleva el nombre del fallecido político socialista (1906-1999), recala desde ayer en la sede del Parlamento vasco como símbolo de reconocimiento institucional a su figura y a su condición de tal. El tratamiento le fue negado en su día por la coexistencia del preautonómico Consejo General Vasco, del que fue primer presidente, con el Gobierno vasco del exilio, que encabezaba el peneuvista Jesús María de Leizaola, y al que el PNV atribuía la legitimidad y la continuidad histórica con el Ejecutivo autonómico de la Segunda República.

Su hija, y senadora socialista, Lentxu Rubial, le recordó ayer como "el primer lehendakari de la Transición política", reclamando el título por el que él mismo dijo que le gustaría ser llamado al ser elegido el 17 de febrero de 1978.

Su ideario político lo resumió en las palabras que pronunció al trasplantar un retoño de roble en la Casa de Juntas de Gernika. "Que este árbol nuevo represente la unión de todos los vascos. Que las discrepancias y posturas encontradas se solucionen. Que todo aquel que viva en nuestro país , haya o no nacido en él, se pueda encontrar protegido bajo su sombra. Que todo el futuro que representa el nuevo árbol sea para nuestro pueblo lo más próspero posible en un marco democrático, pacífico y solidario", dijo aquel día.

En la inauguración de la muestra, a la que asistió ayer la Mesa del Parlamento y los portavoces de todos los grupos, además de patronos de la Fundación Ramón Rubial, la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, alabó el espíritu de acuerdo que les guió a él y a su equipo, integrado por el PNV, el PSE, UCD, EE e independientes. "Fueron capaces de aunar energías, hacerse fuertes en lo que les unía y dejar a un lado la confrontación estéril", dijo. Quiroga confió en que "cunda el ejemplo".

La muestra estár abierta al público hasta el próximo día 16.