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Entrevista:INÉS IBÁÑEZ DE MAEZTU | Directora de Derechos Humanos

"Reconocer a las otras víctimas engrandece al Estado de derecho"

Nada más sentarse y empezar a hablar, Inés Ibáñez de Maeztu define la que le ha tocado gestionar como "una dirección que pone úlcera".

Pregunta. ¿Tan mal se encontró las cosas?

Respuesta. No es por lo que me encontrara, sino porque sé que es de mucha responsabilidad y de mucho ojo político.

P. ¿Por dónde empezó?

R. Por reformular el llamado Plan de educación para la paz y en derechos humanos para hacerlo coherente con el discurso del lehendakari y las cuestiones que planteó el Ararteko, para que tuviera un posicionamiento más claro frente a la violencia de ETA. Ahora es el Plan de convivencia democrática y deslegitimación de la violencia.

P. El foco se halla en estos momentos en el nuevo informe sobre las víctimas policiales. ¿Por qué hacerlo ahora?

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"Todo el mundo tiene ganas de cerrar este tema con responsabilidad"
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R. Porque es un mandato parlamentario.

P. Cuando se trata de proposiciones no de ley, no obligan legalmente, y muchos mandatos no se cumplen. Podrían haberlo obviado o decir que no es el momento. ¿Tiene algún significado que el PSE y el PP, partidos que han gobernado durante todos esos años, lo asuman?

R. Sí, el de engrandecer el Estado de derecho. Son dos partidos que han ocupado responsabilidades de Estado y miran para atrás y saben reconocer críticamente aspectos que no han funcionado puntualmente bien.

P. ¿Tiene el aval del PSOE y del PP nacional?

R. Yo no he tenido que gestionar nada. Creo que, al menos en el caso del PSE, se ha actuado con autonomía.

P. ¿Por qué han creído que el momento era el apropiado?

R. El momento es cuando nos mandan hacerlo, además por acuerdo de todas las fuerzas políticas. ¿Cómo no le vamos a dar prioridad? Y, aun así, nos ha costado y nos hemos demorado, por hacer un trabajo de cocina que ha dado como resultado este punto de consenso.

P. ¿Han sido muchas las dificultades?

R. No tantas. Al final, era cuestión de matiz y de estructura, sobre todo la cuestión de las víctimas en un Estado ya plenamente democrático, y la carencia de un listado, que no nos ha parecido adecuado incluir porque aún no hay sentados unos criterios para determinar quién es o no víctima. Los tiene que acordar el Parlamento.

P. Las de ese último período van a ser, sobre todo, víctimas de torturas, una cuestión que tienen sin hincarle el diente.

R. El Estado democrático y de derecho funciona ya en ese periodo y, de hecho, estamos pendientes de qué sentencia tenga el caso de Portu y Sarasola.

P. ¿Por qué?

R. En el sentido de que el Estado de derecho funciona, que hay denuncia, que se juzga,... No queremos decir que no esté funcionando, sino, como se dice en el informe, y también dicen los organismos internacionales, que ha podido haber carencias en la investigación. Habrá que ver cómo abordamos todos estos pasos.

P. ¿Qué le parece la posición de la AVT?

R. Respetable. No dejamos para nada en segundo lugar la atención a las víctimas del terrorismo, porque está todavía vigente, ha producido mucho daño a este país durante muchos años y lo produce aún. Aun está limitando la libertad de muchas personas y esas personas, como dijo Jesús Loza en el Parlamento, están sufriendo una tortura.

P. Pero la AVT ha acusado al Gobierno de estar convirtiendo a los verdugos en víctimas.

R. No sé si ellos tienen muy claro ya qué tipología de víctimas hay. Todo eso habrá que verlo cuando tengamos claro qué tipología de víctimas hay y a qué responde cada una. No estamos aún ahí. En todo caso, no estamos haciendo nada que se salga de la ley.

P. ¿Estuvieron las víctimas del terrorismo en la labor de cocina?

R. Sí. No tomaron posición, pero tuvieron la información de primera mano, para que no hubiera transmisiones extrañas.

P. ¿Se indemnizará económicamente a las víctimas que encajen dentro del informe?

R. Los parámetros de reparación lo contemplan, pero lo tendrá que determinar el Parlamento. Hemos dado las líneas generales de las recomendaciones, pero ahora es el Parlamento el que tiene que acordar. La clave es que el Gobierno trabaje sobre el consenso de todos los grupos.

P. ¿Confía en que el acuerdo alcanzado el pasado miércoles en el debate en la Cámara se mantenga?

R. Ojalá. Lo veo difícil, pero hay que conseguirlo. Ese será el gran reto del Parlamento y de todos los grupos.

P. ¿Como van a salvar la negativa del PP a admitir que Gobiernos de la UCD o del PSOE ampararan o alentaran acciones policiales o parapoliciales vulneradoras de derechos humanos?

R. Publicar la Constitución nos hizo formalmente un Estado democrático y de derecho, pero hay actitudes de todos que hay que limar y es lo que nos encontramos. No creo que eso deba tomarse como una deslegitimación del Estado ya democrático, sino como casos puntuales que suceden en cualquier país.

P. Por ahí no va a pasar el PP.

R. Tampoco generó mayor debate. Lo deberá plantear en el grupo de trabajo del Parlamento.

P. ¿Confía en que haya un entendimiento final?

R. Con toda la prudencia, espero que sí. Es algo que debemos cerrar. Fácil no va a a ser, pero creo que todo el mundo, incluido el PP, por lo que yo he observado, tiene muchas ganas de entrar en este tema con responsabilidad.

P. ¿Se está preparando de algún modo con estos pasos el camino a la conciliacion o la reconciliación tras el fin de ETA?

R. El ambiente que se ha generado con un cambio de discurso en la izquierda abertzale podría facilitar eso, pero este reconocimiento no tiene nada que ver con ese horizonte, y no me gustaría que se viera de esa manera. Tiene que tener su autonomía.

P. ¿Por qué es más posible ahora que hace dos años?

R. Es una cuestión de fuerzas políticas. Del mismo modo que al PNV le costó entrar con las víctimas del terrorismo, que fue un proceso largo -desde 2003, cuando se empieza a trabajar de forma decidida con una ponencia en el Parlamento hasta 2008 no vemos una ley- y con mucha presión de la oposición, ahora pasa un poco al contrario. Pero yo espero que no sea tan costoso. Hay un clima más favorecedor, de más acuerdo entre los grupos.

P. ¿Ayuda el que no haya atentados?

R. De verdad, lo desvincularía. Esta tarea viene pendiente desde 2007. Tuvo una gestión que dividió al Parlamento por falta del trabajo de cocina que ahora sí hemos hecho, pero nada más.

Inés Ibáñez de Maeztu, ante el monumento que recuerda a la entrada del Parlamento a las víctimas del terrorismo.
Inés Ibáñez de Maeztu, ante el monumento que recuerda a la entrada del Parlamento a las víctimas del terrorismo.P. J. PHANSE

"El informe es una responsabilidad institucional que estaba pendiente" Ningún conflicto

"No lo hemos contemplado desde ese punto de vista", responde Inés Ibáñez de Maeztu cuando se le pregunta si adelantarse en el reconocimiento institucional a las víctimas policiales, puede dificultar su posible utilización por la izquierda abertzale. "Actuamos solo desde un planteamiento de responsabilidad", añade.

Pregunta. ¿Cree que se prepara una batalla con la izquierda abertzale respecto de "sus" víctimas?

Respuesta. Creo que no son sus víctimas. Son responsabilidad de todos; nadie se puede apropiar de unas víctimas. Igual que las del terrorismo, deberían ser de todos.

P. ¿Eso no contradice la negativa de que hay víctimas de uno y otro lado y que todo son víctimas del conflicto político?

R. No, porque no hay conflicto político. No abordamos esto desde una visión política, sino desde el reconocimiento que hay que hacer a las víctimas, cada una con sus características. ¿Qué les une? El sufrimiento. Otra cosa son las circunstancias que rodean a cada víctima y el tratamiento de reparación que se decida. Eso es justo lo contrario a equiparar víctimas.

P. ¿Si se plantea esa batalla, como piensan manejar la situación?

R. Rechazando que sean víctimas de algún propietario. Este informe y este reconocimiento y reparación eran una responsabilidad institucional que estaba pendiente.

P. Ya hay quien dice que hay que dejar de hablar de 800 víctimas del terrorismo y pasar a hablar de 1.300 del conflicto. ¿Se terminará ahí?

R. Veremos cuál es su posición. No nos adelantemos. Lo que esta claro es que el informe presentado en la Cámara esta semana niega con rotundidad la teoría del conflicto. De eso no hay duda alguna.

P. ¿Qué quiere decir diferenciación sí, jerarquización no?

R. Que no hay unas víctimas de primer rango y otras de segundo, pero que diferenciar es necesario, y en el informe hemos dejado clarísimo que no hay equiparación posible.

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