_
_
_
_
_

Un cisma en el grupo Mondragón

La salida de Irizar y Ampo de MCC abre el mismo debate en otras cooperativas como Ulma y Orona

Mikel Ormazabal

Mondragón Corporación Cooperativa (MCC), el primer grupo empresarial del País Vasco y el séptimo de España, con presencia en cuatro continentes, atraviesa uno de los inciertos momentos de sus más de 50 años de historia. El sólido entramado cooperativo que ha logrado ensamblar en todo este tiempo comienza a resquebrarjase cuando dos de sus integrantes, la firma de autobuses Irizar y la fabricante de válvulas Ampo Poyan, podrían decidir este mes abandonar el grupo Mondragón.

Irizar y Ampo piden un relevo generacional en la cúpula del grupo

"Es la primera vez que ocurre algo semejante en MCC. Ha causado mucha conmoción", reconoce un representante de la corporación. La asamblea de Ampo votará mañana si continúa en MCC o inicia una andadura en solitario; los socios de Irizar tomarán una decisión el próximo día 29 de mayo. Este mismo debate también se está produciendo en la empresa Urola, que conforma con las dos anteriores una división propia dentro de MCC llamada Goikide. La posible marcha de Irizar y Ampo, que ya ha provocado un enorme revuelo en el conjunto del grupo, ha contagiado a otras cooperativas de renombre, como Ulma y Orona, en cuyo seno también se está sopesando, aunque de un modo aún incipiente, tomar el mismo rumbo de salida.

La crisis abierta tiene un gran calado. MCC podría perder a uno de sus emblemas: Irizar, con sede en Ormaiztegi, es el primer fabricante de autobuses de España y el segundo de Europa. Ampo, radicada en Idiazabal, tiene un peso más modesto, aunque atraviesa una situación boyante. Ambas cooperativas, que el pasado ejercicio facturaron en conjunto algo más de 600 millones de euros, han dado este paso por las discrepancias que mantienen con el modelo de gestión empresarial y el reparto de los dividendos que rige en MCC.

Tanto Irizar como Ampo han aplicado en sus factorías el modelo que en su día puso en marcha el consultor Koldo Saratxaga, coordinador de la empresa de autobuses durante 14 años hasta colocarla como líder en su sector. Inspirador de la "democratización" de la empresa, implantó un esquema organizativo basado en dar protagonismo y capacidad de decisión a las personas (trabajadores).

Irizar y Ampo, que siguen estando asesoradas por Saratxaga, han pretendido sin éxito trasladar su filosofía al resto del grupo cooperativo y sugerido la necesidad de acometer un profundo relevo generacional en la cúpula de MCC, lo que ha producido un fortísimo choque con los directivos de esta organización. También existen discrepancias de fondo con el régimen económico que rige entre las cooperativas. El reglamento interno establece la obligación de aportar un 10% de los beneficios al fondo central de intercooperación, que sirve para ayudar a financiar grandes inversiones de las cooperativas, y destinar entre un 15% y un 35% de los dividendos para a una bolsa de "solidaridad", empleada en reflotar a las compañías que atraviesan una situación delicada.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El debate que han abierto Irizar y Ampo se ha trasladado a otros dos símbolos de MCC como Ulma (Oñati), un grupo con siete unidades de negocio, y la firma de ascensores Orona (Hernani). Estas dos cooperativas también comparten la idea de afrontar una renovación del grupo Mondragón.

La dirección de MCC no va a pronunciarse sobre la posible salida de Irizar y Ampo. Lo harán previsiblemente en la asamblea general que celebra el próximo martes. Admite la existencia de un modelo de gestión diferente y reconoce que todas las cooperativas son soberanas para decidir su salida del grupo.

El grupo cooperativo, en cifras

- Mondragón Corporación Cooperativa. Fundada en 1956, el año pasado rozó los 15.000 millones de facturación y unos beneficios de 2.500 millones. Suma 94.500 trabajadores.

- Irizar. En 2007 facturó 435 millones y alcanzó las 3.900 unidades de producción. Su plantilla llega a 3.100 personas.

- Ampo Poyan. Las ventas en 2007 llegaron a los 180 millones. Cuenta con 510 trabajadores

- Ulma. 723 millones de ventas y 4.460 empleados.

- Orona. 400 millones de facturación y 3.000 trabajadores.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_