Los divorcios caen un 8,2% por el efecto de la crisis económica
Los divorcios y las separaciones volvieron a caer en Euskadi durante el conjunto del año pasado hasta un 8,2% con relación a los registrados en 2007, confirmando así la tendencia que se vive en el conjunto de España. Ante la inestabilidad laboral, la crisis y la carestía de la vivienda, las parejas optan por aguantar bajo el mismo techo, aunque los lazos afectivos se encuentren rotos.
El presidente de la Asociación de Padres y Madres Separados de Guipúzcoa, Justo Sáenz, advirtió ayer al presentar los datos, que figuran en la última memoria del Consejo General del Poder Judicial, que la coyuntura actual está haciendo que se retrasen las separaciones lo que "agrava el problema, porque las situaciones se pueden complicar y llegar a estallar". "Los menores son los más perjudicados. Las parejas no se pueden divorciar por una imposibilidad económica", añadió.
Durante 2008, se cuantificaron en Euskadi un total de 5.103 divorcios y separaciones frente a las 5.662 de 2007, año en que ya se había registrado otro descenso. Por territorios, Guipúzcoa es donde menos caen (un descenso del 0,9%), mientras que en Vizcaya bajan un 11% y en Álava, un 12,8%. En el conjunto de España la rebaja media se situó en el 6,9%.
Impago de pensiones
Sáenz detalló algunas de las dificultades a las que se enfrentan los cónyuges para separarse. Es el caso de la venta de la vivienda en un momento en que el mercado se halla bloqueado, las situaciones de paro y los problemas para acceder a pisos protegidos, al no computarse los ingresos netos.
Una consecuencia añadida es que han aumentado los impagos de las pensiones alimenticias en los casos de parejas ya divorciadas. Por ello, urgió a la Administración a poner en marcha de manera urgente un fondo de garantía social, que debía estar activo desde hace un año. Además, crecen los impagos de las hipotecas de la ex vivienda conyugal, lo que puede acarrear el embargo.
El perfil de las parejas que más se divorcian corresponde a las que se encuentran en el tramo de entre 35 y 45 años y tienen uno o dos hijos. La psicóloga Julia Rodríguez, quien acompañó a Sáenz en su rueda de prensa en San Sebastián, apuntó que han aumentado los casos de petición de custodia compartida por los hombres y que la mediación familiar se consolida como un recurso "imprescindible" para articular esa custodia compartida y ejercerla cada día. Esa mediación ayuda a superar los conflictos al fijar pensiones o evitar situaciones de impago.
