Un juzgado dicta medidas sobre la venta de un colegio en Santurtzi
El Juzgado de Barakaldo (Vizcaya) ha ordenado al duque de Santoña, Juan Manuel Mitjans Domecq, que se abstenga de utilizar el millón de euros que recibió por la venta del colegio Hijas de la Cruz, de Santurtzi, hasta que se determine si es el patrono de la Fundación Murrieta, propietaria del centro. El juzgado ha aceptado así las medidas cautelares propuestas por el Ayuntamiento de Santurtzi en el proceso judicial abierto por la polémica venta del colegio Hijas de la Cruz, tras conocer que Mitjans Domecq estaba haciendo uso de ese dinero sin que hubiera una sentencia firme que le proclamara patrono de la Fundación Murrieta.
El alcalde de Santurtzi, Ricardo Ituarte, señaló ayer que "si el patrono es el Ayuntamiento, como defendemos, ese dinero no le pertenece por el momento, con lo cual no entendemos que pueda disponer de éste para los movimientos que desee". Ituarte indicó que desde el pasado 26 de abril el duque de Santoña está utilizando este dinero y que "ha destinado 23.200 euros a donaciones de carácter social, 69.600 a asesoramiento legal y el resto está invertido en títulos y valores" y que "compra un día y vende al siguiente, buscando su lucro personal".
La venta del centenario centro educativo que gestionaba la congregación Hijas de La Cruz a una promotora inmobiliaria originó una fuerte polémica en la localidad. La corporación municipal recurrió judicialmente la operación y anunció que impediría por todos los medios un pelotazo urbanístico en el solar.
