La nueva residencia universitaria de Vitoria se abrirá en septiembre
Las residencias estudiantiles decimonónicas ubicadas en edificios imponentes regidos bajo parámetros casi monásticos forman parte de la historia y de un imaginario colectivo muy alejado de la realidad actual. El campus universitario de Vitoria contará a partir de septiembre con un moderno edificio de apartamentos con 220 plazas que incorpora servicios comunes como sala de ordenadores conectada con otras residencias, gimnasio y aparcamiento particular, además de habitaciones dobles e individuales con cocina equipada, teléfono, calefacción y conexión a Internet.
Esta suerte de balneario académico, que ha abierto el plazo de reservas para cubrir los 180 apartamentos individuales, los 28 dobles y los 12 destinados a profesores, ha tenido una lenta gestación. Situado en la antigua parcela del Hospital militar, tuvo que esperar un azaroso acuerdo interinstitucional para concretarse. Finalmente se ha encontrado una fórmula de concesión por parte de la Universidad del País Vasco (UPV) a una empresa privada.
La firma adjudicataria de la residencia, bautizada como Tomás Alfaro Fournier en honor a un insigne historiador y artista vitoriano de principios del siglo pasado, es la empresa Siresa Euskadi, en la que participa la sociedad Elkarkidetza en un 60% y la firma catalana Resa en el 40% restante. Siresa desembolsará 850 millones de pesetas a cambio de gestionar la residencia durante los próximos 45 años.
34.000 pesetas mensuales
'La fórmula más tradicional es la del colegio mayor, pero hemos optado más por un edificio de apartamentos', señala el vicerrector del campus, Antonio Rivera. 'Permite una autonomía personal mayor para disfrutar de este espacio'. Está situado a escasos metros de un centro cívico, al lado del futuro Archivo histórico provincial que se inaugurará en fechas similares y próxima a las principales facultades universitarias en la zona Sur de la ciudad. La construcción formará parte de una cadena de residencias estudiantiles que cuenta ya con ocho equipamientos similares en el resto de España.
Los responsables de la firma concesionaria esperan que en pocos años cuente con una ocupación próxima al 100% después de anunciar que los precios oscilarán entre las 34.000 y las 44.000 pesetas. Para Álava, este vanguardista servicio supone 'la consolidación del campus', según Rivera, dentro de un distrito universitario que cuenta con más de 8.000 alumnos.
De ellos, el 60% procede de otras provincias, un contingente de estudiantes que en su mayoría se sirve del transporte diario para desplazarse hasta la capital alavesa. El estudiante modelo al que va dirigido este tipo de servicio es el alumno de fuera de Vitoria, además del medio centenar de universitarios extranjeros acogidos al programa de intercambio Erasmus.
