_
_
_
_
_
Reportaje:

La victoria sobre el tiempo

- Un documental rememora la vida y la obra de Balenciaga - El filme se articula sobre la confección a mano de un vestido

Oskar Tejedor (Legazpi, 1968) se adentró en el universo de la obra y la persona del modisto Cristóbal Balenciaga (Getaria, 1895-Valencia, 1972), fascinado por su elegancia y plasticidad. El realizador tenía dos preguntas clave para darle vida a un documental sobre Balenciaga: ¿quién era ese hombre que en 50 años de carrera profesional nunca concedió una entrevista? y ¿cómo la obra de uno de los principales creadores de la historia del diseño de moda ha vencido a lo efímero?

Durante dos años, el cineasta, autor del premiado documental Cuidadores, tocó las puertas de quienes trabajaron o conocieron al autor que revolucionó la moda femenina. Muchas de ellas no se le abrieron. "En 2008, había saltado por los aires la gestión fraudulenta del Museo Balenciaga [que se inaugura la próxima semana] y no recibí nada de ayuda para investigar. Solo Givenchy y Sonsoles Díaz de Rivera [patronos de la Fundación y amigos personales del modisto] colaboraron", recuerda ahora Tejedor.

El realizador viajó a Francia, EE UU e Inglaterra para investigar sobre el modisto
"Fue constante, perfeccionista y, sobre todo, coherente", señala Tejedor

Así, inició un recorrido por Francia, Inglaterra y EE UU en busca de testimonios de diseñadores, clientas y empleados de Balenciaga. Hasta cinco veces tuvo que viajar a París para que Emanuel Ungaro, receloso, accediese a hablar sobre su amigo. Y en Texas encontró a esposas de magnates del petróleo que tras la II Guerra Mundial fueron compradoras de alta costura.

Tejedor tenía claro que su documental, Balenciaga, permanecer en lo efímero, presentado la semana pasada en Madrid, debía contar con testimonios de primera mano: "No me interesaban las leyendas alrededor suyo, que las hay muchas; me interesaba información lo más fidedigna".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El hilo conductor del filme, coproducido por Francia, España y Holanda, es la construcción de un traje de Balenciaga de los años cincuenta. Juan María Emilas, discípulo del modisto guipuzcoano, confecciona una prenda sobre el cuerpo de Díaz de Rivera, tal y como se hacía antes. El documental desgrana cómo se fabrica a mano el vestido y cómo se va ajustando sobre el cuerpo de la clienta. "Parto de la confección del vestido para hacer un viaje por la vida, la obra y su repercusión para la moda hasta hoy", explica el realizador.Tejedor se hizo preguntas, pero también logró respuestas. Sobre la obra de Balenciaga, sus clientas destacan "la simplicidad, la comodidad, la innovación del tejido y su uso. La arquitectura de sus vestidos dotaba de personalidad a las mujeres tal y como él las concebía", recalca Tejedor. Como persona fue "constante, perseverante, perfeccionista y, sobre todo, coherente desde el principio hasta el final. Un hombre respetado por creadores y modelos".

El documental, un proyecto "rentable en lo humano, pero poco en lo económico", según su autor, inicia ahora una gira en la que será proyectado en varias ciudades de España, junto a conferencias y desfiles en torno a la obra del diseñador.

Oskar Tejedor, ayer frente al edificio donde Balenciaga tuvo uno de sus últimos talleres en San Sebastián.
Oskar Tejedor, ayer frente al edificio donde Balenciaga tuvo uno de sus últimos talleres en San Sebastián.JAVIER HERNÁNDEZ

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_