Hormaechea dimite, pero se queda de árbitro

El presidente de Cantabria, Juan Hormaechea, formalizó ayer a mediodía su dimisión. Su jefe de gabinete entregó la renuncia en la Asamblea Regional, mientras el dimisionario abría su campaña electoral (como muestra la foto) con la "inspección" de unas obras en uno de sus feudos. La dimisión del presidente, condenado a seis años de cárcel y 14 de inhabilitación por malversación y prevaricación, le deja pese a todo como árbitro de la situación política. Salvo un pacto, entre los dos principales grupos parlamentarios,socialistas y populares, Hormaechea puede bloquear con los votos de sus fieles la elección de nuevo presidente. Página 16