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MONUMENTAL VACÍO

Una raquítica asistencia (como muestra la imagen) vio ayer la primera corrida celebrada en la plaza Monumental de Barcelona tras la prohibición de los toros en Cataluña, que será efectiva a partir de 2012. Es la tónica habitual. Lo excepcional fueron los gritos de "¡libertad!, ¡libertad!" con que los aficionados culminaron el paseíllo y el manifiesto que se leyó por megafonía exigiendo respeto "a nuestra cultura". Fuera del coso, gritos e insultos entre no más de medio centenar de taurinos y antitaurinos.

SUSANNA SÁEZ

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