La ola de atentados causa 66 muertos en 24 horas en Irak

Al menos 66 personas han muerto en Irak en menos de 24 horas en una serie de atentados suicidas que confirma una reactivación de la violencia a pocas semanas de que el Ejército estadounidense se retire de los centros urbanos. Un total de 26 personas morían ayer en tres atentados, al día siguiente de la explosión de un minibús que causó la muerte de otras 40 en un mercado chií de Bagdad, y que fue el más mortífero de los perpetrados en el país árabe en el último mes. Un terrorista mató ayer a 15 personas, entre ellas tres soldados estadounidenses, al hacer estallar una carga explosiva adosada a su cuerpo a las puertas de un mercado en el distrito de mayoría suní de Dura, al sur de Bagdad. El objetivo del suicida era una patrulla conjunta de militares estadounidenses y árabes suníes, que forma parte del plan del Gobierno iraquí para combatir a Al Qaeda. En Kirkuk, 250 kilómetros al norte de Bagdad, otro suicida mató a ocho policías en una comisaría, y en Bagdad, tres agentes murieron al estallar una bomba escondida en un contenedor de basura, al oeste de la ciudad. La ola de ataques de las últimas horas pone en duda la capacidad de las fuerzas del orden iraquíes para evitar una escalada de violencia cuando las tropas de EE UU se retiren de las ciudades a finales de junio, en cumplimiento de los acuerdos de seguridad firmados el 13 de diciembre.