_
_
_
_
_
EL RINCÓN

El poeta que se convirtió en empresario

Poesía, música, artes plásticas, cine, teatro..., es difícil encontrar a una persona que haya estado relacionada con todas estas disciplinas y haya dejado huella en cada una de ellas, pero es el caso de Antón Reixa (Vigo, 1957), un artista total -no le gusta la etiqueta de multidisciplinar-, quien desde hace una década dirige la productora audiovisual Filmanova, que produce películas y programas de televisión. Aunque puede parecer que se ha perdido un artista y ha nacido un empresario, Reixa asegura que esto no es del todo cierto porque la creatividad también se puede aplicar en los negocios y, además, él encuentra tiempo para dedicarse a las actividades que más le gustan, entre las que sobresale la poesía. En los últimos meses está inmerso en la preparación de una exposición sobre su obra videográfica y literaria que tendrá lugar este verano en las salas del Centro Galego de Arte Contemporáneo (CGAC) de Santiago de Compostela. Como buen poeta, Reixa es especialmente conocido por una frase-verso, "fai un sol de carallo", que fue el estribillo de una canción de los años ochenta con la que la lengua gallega se hizo visible para muchos. En realidad, antes de embarcarse en la aventura musical que supuso su etapa como líder del grupo Os Resentidos, Reixa ya había comenzado a publicar poesía y formó parte del influyente colectivo poético Rompente. Aún hoy confiesa que escribir poemas es la actividad creativa en la que es más constante, pero a lo largo de estos 30 años no ha dejado de poner en marcha proyectos. Ha realizado múltiples piezas de videocreación, dirigido películas (El lápiz del carpintero, Hotel Tívoli), documentales y también ha escrito y producido obras de teatro. Ahora prepara un musical para 2012 con el título de Galicia Canibal. Confiesa que pronto se dio cuenta de que vivir de la poesía era imposible, pero la creación está presente en todo lo que hace e incluso sospecha: "Tal vez lo más creativo que he realizado esté en la parte empresarial". Reixa trabaja habitualmente en las oficinas de su productora en A Coruña, pero todavía le queda algún rastro de la educación infantil de otras épocas en las que se consideraba que para trabajar había que estar sentado detrás de un escritorio durante muchas horas. "Me viene bien tener la pantalla del ordenador delante de mí porque así me hace sentir la sensación de que estoy trabajando. Me cuesta entender que un día lleno de reuniones es un día de trabajo", explica el productor, quien aprovecha la intimidad del hogar para desarrollar sus proyectos artísticos personales. "Ser empresario contribuye a rebajar tu ego porque trabajas para que salga adelante el talento de otros", concluye Reixa.

"Ser empresario contribuye a rebajar tu ego porque trabajas para que salga adelante el talento de otros", sostiene Antón Reixa.
"Ser empresario contribuye a rebajar tu ego porque trabajas para que salga adelante el talento de otros", sostiene Antón Reixa.GABRIEL TIZÓN

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_