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COMPLEMENTOS

La viveza del 'Swing'

Andrea Aguilar

Joe's Pub, el íntimo club neoyorquino de música en directo de la calle Lafayette, fue el lugar elegido para la presentación del modelo de gafas de sol Prada Swing. Una atmósfera jazzy con un toque años sesenta subrayaba el toque retro-chic de las lentes en cuestión. Allí no solo estaba el nuevo accesorio, sino artistas como Vanessa Beecroft o Tom Sachs. Al fin y al cabo, Prada siempre ha cuidado su veta artística. La propia Miuccia (miembro en su juventud del partido comunista y ardiente feminista en sus años universitarios) trabajó como mimo en el teatro Piccolo de Milán antes de tomar las riendas del negocio familiar. Prada, convertida en sinónimo de lujo, contrató a arquitectos estrella como Rem Koolhaas o Herzog & De Meuron para el diseño de sus tiendas en Nueva York, Los Ángeles y Tokio.

"Prada, que recortó su deuda el año pasado y obtuvo un beneficio de 500 millones de euros, prepara su desembarco en el mercado chino"

Las Swing hicieron su debut en el desfile de otoño-invierno para la temporada de 2010, y el pasado octubre salieron a la venta disponibles en tres colores (marfil, negro y carey). Forman parte de los cerca de 150 modelos presentados en cuatro colecciones al año y fabricados, según los diseños de Prada, por el gigante italiano de la óptica Luxotica. Según la jerga musical, swing es un término que define el paso de un tono a otro. Alude también a un estilo caracterizado por la viveza del ritmo. "Si este sonido se pudiera diseñar, tendría las suaves y fluidas líneas de la nueva colección de Prada", explica la marca italiana.

Pero más allá de notas y acordes, el swing en un cuadrilátero es un golpe dado lateralmente para evitar la guardia del contrario. Y quizá sea este un contexto más adecuado para explicar el salto de Prada al proceloso mundo del comercio electrónico en plena recesión. Los feroces descuentos que aplicaron los grandes almacenes en Estados Unidos (Barneys, Neiman Marcus o Saks) a los productos de las marcas de lujo en 2008 y 2009 llenaron de ansiedad a muchos de los fabricantes, que de alguna manera sentían perder el control de su imagen al ver caer su posicionamiento en la escala de precios. La respuesta, en algunos casos, ha sido lanzarse al creciente mercado electrónico a través de sus propias páginas web. "Internet es una oportunidad extra, no una estrategia de salida", dice el director de comunicación de Prada, Stefano Cantino. "Nuestra marca quiere tener el control, y esta nueva expansión se está llevando a cabo con mucho cuidado, paso a paso. Los canales tradicionales de venta, en tiendas y en grandes almacenes, son la parte principal de nuestro negocio, pero sabemos que el comercio electrónico es muy importante para una clientela nueva".

El pasado julio, Prada abrió las puertas de su tienda electrónica en EE UU. Como en el resto de los 18 países -España incluida en los que funciona el comercio por Internet de esta marca, solo se pueden adquirir por esta vía productos en piel (bolsos, maletas, carteras) y gafas de sol. No está en oferta ninguna prenda del prêt-à-porter. "Sentimos que debemos controlar la distribución de todos nuestros productos y que aunque es distinto que un cliente compre un bolso de cocodrilo que un par de gafas, el nivel en el que se sitúe la marca debe ser el mismo. Hay que transmitir que Prada está ahí", explica Cantino.

China será el próximo mercado en el que Prada avanzará electrónicamente. "Asia es el mercado que crece más rápido y allí tenemos además fábricas", apunta Cantino. También es posible que la histórica marca milanesa (que incluye también las marcas de Miu Miu, Car Shoe y Church), encuentre allí nuevos inversores, según informaba la agencia Bloomberg en octubre. El pasado año logró recortar su deuda y abrió nuevas tiendas -entre otras, dos nuevas en España-. Se espera que las ventas de esta compañía fundada en 1913 por Mario Prada -el abuelo de la inquieta Miuccia- alcancen los 2.000 millones de euros en 2010. Las ganancias antes de aplicar intereses, depreciaciones, amortizaciones e impuestos ascenderían a 500 millones de euros. La decisión sobre emprender una oferta pública de venta en Asia será tomada a finales de año. Mientras tanto, continúa el swing.

En tres colores.
La gafas Swing de Prada se pueden encontrar en tres colores: marfil, negro y carey.
En tres colores. La gafas Swing de Prada se pueden encontrar en tres colores: marfil, negro y carey.
Imagen de la presentación en Nueva York.
Imagen de la presentación en Nueva York.

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Sobre la firma

Andrea Aguilar
Es periodista cultural. Licenciada en Historia y Políticas por la Universidad de Kent, fue becada por el Graduate School of Journalism de la Universidad de Columbia en Nueva York. Su trabajo, con un foco especial en el mundo literario, también ha aparecido en revistas como The Paris Review o The Reading Room Journal.

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