_
_
_
_
_

Biomasa pura de oliva

Jaén aspira a generar energía con los residuos de sus olivares, pero las bajas primas para agricultores amenazan inversiones millonarias

Ginés Donaire

Las 600.000 hectáreas que conforman el mar de olivos de la provincia de Jaén se han convertido en un referente mundial para la generación de energía a través de la biomasa. Se calcula que, si se aprovechara todo el potencial procedente de los residuos del olivar, Jaén se autoabastecería e incluso podría vender energía a otras provincias. El potencial energético de la poda del olivar representa el 16% de la biomasa aprovechable en Andalucía, según datos de la Agencia Andaluza de la Energía. Además, con los 2.500 kilos de residuos de poda del olivar por hectárea, se podrían producir 1.770 millones de litros de etanol al año, un 15% del consumo total anual de gasolina en España, con un posible valor de mercado de unos 2.000 millones de euros.

Todo este enorme potencial derivado de los residuos de la poda del olivar han activado un buen número de proyectos que, de prosperar, se convertirían en una excelente alternativa económica en una provincia marcada por el monocultivo oleícola. Sin embargo, este potencial está seriamente amenazado. La baja prima que recibirán los agricultores que produzcan energías alternativas ha puesto en peligro la ejecución de al menos nueve proyectos que la firma Valoriza Energía, filial del grupo Sacyr Vallehermoso, había anunciado en Jaén para el fomento de la biomasa, con una inversión de 175 millones de euros y la creación de 300 empleos.

El sindicato Comisiones Obreras ha advertido del peligro que corren los proyectos promovidos por Valoriza Energía si no se incrementa, al menos entre un 50% y un 70%, la prima que los agricultores recibirán por el alperujo y por los residuos forestales, que apenas llega a siete céntimos el kilovatio. Joaquín Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente de CC OO, sostiene que si el Gobierno no eleva esa prima "no habrá rentabilidad" para que los agricultores fomenten la biomasa y las energías renovables. Las empresas promotoras de estas instalaciones han mostrado su preocupación porque la prima establecida en el borrador legislativo del 28 de noviembre de 2006 no cubre los costes de explotación, lo que deja en el aire una inversión millonaria en la provincia jiennense dentro del llamado plan Activa Jaén.

Valoriza Energía había previsto generar en las nueve plantas de biomasa proyectadas en Jaén 152 megavatios de energía, tratar 970.000 toneladas de alperujo (residuo obtenido en la extracción del aceite) y 261.000 de biomasa. Además, eso hará que se dejen de emitir más de 524.000 toneladas de CO2 a la atmósfera. El director de Valoriza Energía, Emilio López, ya ha admitido que existen "barreras" para el desarrollo de estos proyectos, y entre ellas aludió a las primas por estos residuos, "más competitivos en otras zonas de Europa".

Otro de los productos derivados del olivar es el orujillo que sale del proceso de extracción del aceite en las almazaras y posteriormente de las extractoras de orujo, y que tiene un gran valor energético para su valoración como biomasa para la producción de energía eléctrica. Sólo en la provincia de Jaén habría una capacidad de producir cerca de 100 megavatios, que abastecería el 40% de la demanda de energía eléctrica del conjunto de la provincia. Sin embargo, también aquí resulta paradójico que la mitad de la biomasa generada con el orujillo se venda fuera de España, a pesar del déficit energético del país.

Jaén acaparó el último año el 40% de las 700.000 toneladas de orujillo producidas en el ámbito nacional. De esta cantidad, el 50% se exportó, sobre todo a industrias eléctricas del Reino Unido, Bélgica e Italia. A esos países no les importa pagar la biomasa hasta tres veces más de su coste para el productor (unos 40 euros por tonelada) por el encarecimiento que supone el transporte por vía marítima. ¿El motivo? La política de incentivos de sus gobiernos hacia el fomento de energías renovables y, especialmente, de la biomasa. A las industrias que utilizan ese combustible se les concede un certificado verde. En España, la legislación no permite quemar el orujillo en las centrales térmicas para generar energía, algo que sí es posible en el Reino Unido.

Dos únicas plantas

La obtención de energía a través del orujillo puede hacerse a través de combustión directa (para obtener energía térmica), a través de ciclos de vapor o por gasificación. Hasta hace poco, las dos únicas plantas de biomasa que utilizan el orujillo como combustible eran las de Villanueva del Arzobispo (Jaén) y Villarta de San Juan (Ciudad Real). Ambas están casi al límite de la rentabilidad por los bajos precios del mercado: la prima para este tipo de energía en España es del 90% de la tarifa eléctrica de referencia, cinco veces menos de lo que se incentiva, por ejemplo, el uso de la energía fotovoltaica.

El director de la Agencia Energética de Jaén, Agener, José Antonio La Cal, tiene claro que "no se puede cumplir el plan energético mientras se lleven nuestra energía primaria". En la misma línea se pronuncia el presidente de la Asociación Nacional de Extractores de Orujo (ANEO), Fernando Muñoz: "Todo pasa porque el Gobierno revise las primas e incentivos para el fomento de esas energías alternativas". Con todo, la provincia de Jaén está muy por encima de la media nacional en el consumo de energías renovables, con un 19% frente a un 3,64% de media.

ARCHIVO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_