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Cabrera asegura que los símbolos que puedan "agredir" en los lugares públicos "deben quitarse"

La ministra de Educación pide colaboración a la Comunidades Autónomas para aplicar la Ley de Dependencia

Pese a manifestar ayer que el Gobierno no va a intervenir en el conflicto sobre la retirada de símbolos religiosos en los centros públicos, la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, ha asegurado en una entrevista en la Cadena Ser que es un problema que ya quedó "zanjado" con la Constitución, que define a España como un estado aconfesional. "En los lugares públicos, y los colegios lo son por excelencia, cualquier símbolo que pueda agredir o crear sensación de agresión a cualquiera de los que circulan por él debe quitarse de en medio", ha afirmado Cabrera.

La titular de Educación se ha referido a Ley de Dependencia y ha pedido la colaboración de las Comunidades. Preguntada por si Madrid y Valencia están boicoteando la ley, Cabrera ha respondido: "Si no vamos a los datos, podríamos llegar a la conclusión de que hay Comunidades más diligentes que otras, pero prefiero no pensar que hay algunas que no quieren aplicar la ley". El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, anunció ayer el propósito del Gobierno de destinar más recursos para desplegar esta ley.

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Para Cabrera, la Ley de Dependencia no se ha quedado obsoleta. "Es muy joven, no llega a dos años. Más de 200.000 personas están siendo atendidas de acuerdo con la ley que antes no lo estaban", ha indicado. Pero ha insistido en que los Gobiernos autonómicos tienen que trabajar con el Ejecutivo central. "La ley pretende garantizar un mínimo de atención de calidad independientemente de donde se viva".

Retraso en educación

Los informes que sitúan a España en una posición retrasada con respecto a otros países en Educación no le preocupan a la ministra más allá de la información útil que transmiten. "La situación de España no es catastrófica, no la hubiéramos soñado hace 20 o 30 años". Para Cabrera el modelo educativo no ha fracasado, porque de ser así lo hubiera hecho también la democracia. "Sí ha sido un modelo sujeto a muchos cambios, porque veníamos de donde veníamos, por eso hay sensación de que se ha legislado mucho".

¿Pero qué nota le pondría a la educación en España? "Le daría un notable", ha respondido la ministra. Y se marca como objetivo mejorar la calidad del profesorado. "Para ser profesor hay que tener el mejor dominio de las materias, pero también es verdad que como la sociedad y los alumnos son más complejos, con mucha vida fuera de los centros escolares, los profesores necesitan de formación más allá de las materias. Sobre el plan del Gobierno contra la crisis, Cabrera se ha posicionado a favor de tomar medidas "con vistas a un crecimiento futuro, que pasa por una mayor educación.".

Y dos reflexiones sobre dos ámbitos que no son de su departamento. "Las profesiones existen cuando se demandan en el mercado", ha dicho en relación con el plan Bolonia de reforma de la Universidad. Cabrera se ha referido también a la violencia machista. "En el momento en que las voces que condenen la violencia de género sean masculinas habremos dado un paso importante".

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