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El Congreso reparte a entidades vascas la mejora del Presupuesto

Más de 67 millones de I+D van directamente a centros tecnológicos, pero también a proyectos de difícil control - El dinero de Ciencia e Innovación cae un 2,8%

EL PAÍS

El presupuesto del Ministerio de Ciencia e Innovación ha salido del debate parlamentario prácticamente como entró, con un total, para 2011, de 5.824 millones de euros (incluyendo subvenciones y préstamos), lo que significa una reducción del 2,76% respecto al presupuesto de 2010 . En realidad, los grupos parlamentarios han añadido 48 millones de euros, pero esa cantidad va dedicada a aumentar, principalmente, la partida de asignaciones nominativas, sobre todo al País Vasco, es decir subvenciones para instituciones, fundaciones o empresas concretas, que recibirán ese dinero sin pasar por ningún tipo de concurso competitivo ni filtro de calidad o excelencia para ello, como es el procedimiento estándar en los programas científicos de los países desarrollados. En total, las instituciones vascas se llevan más de 67 millones de euros, solo en la parte de investigación.

Urkullu ha ofrecido una auténtica lluvia de euros a centros de todo tipo
La subvención para investigación se da en concursos y tras evaluaciones

Las actividades generales de I+D civil sufren una caída del 7%, pero este año, a diferencia del pasado, cuando sufrió un importante recorte, el departamento de Cristina Garmendia, merma sus activos menos que la media.

La necesidad que ha tenido el Gobierno de los votos del PNV para aprobar el Presupuesto en el Congreso explica que casi todos los destinatarios de las asignaciones nominativas añadidas sean del País Vasco. El año pasado estas ayudas producto de la negociación política con el PNV superaron los 90 millones de euros, aunque luego se redujeron en los recortes de gasto del Gobierno.

En 2011, del total de transferencias en concepto de ayudas nominativas del programa de Fomento y Coordinación de la Investigación Científica y Técnica, que suma 72,638 millones, van al País Vasco 67,652 millones. El resto son subvenciones a entidades públicas e instituciones como el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Residencia de Estudiantes (CSIC) o la Confederación de Sociedades Científicas de España, esta última con 85.000 euros.

Fuentes de los centros de investigación del País Vasco se congratulan de que el 93% de esta partida del presupuesto se destine a proyectos vascos, pero advierten de que la cantidad, en este caso, no guarda relación ni con el contenido ni con la calidad de los proyectos, sino con la posición de fuerza del PNV en esa negociación presupuestaria. Es más, fuentes de una de las principales corporaciones tecnológicas vascas estiman que el partido de Iñigo Urkullu ha hecho una demostración de que "sigue gobernando pese a estar en la oposición" ofreciendo una auténtica lluvia de millones a asociaciones de todo tipo en un momento en el que los Gobiernos de turno están limitados por los recortes presupuestarios, informa Pedro Gorospe.

Algunas de las subvenciones, como la de 12 millones para la Asociación para el Fomento y Promoción de Actividades Industriales y Deportivas de la Automoción, AFYPAIDA, creada en 2008, son muy cuestionadas entre fuentes del sector. Su presidente, el empresario alavés Jesús Echave, impulsa el Parque del Motor en Vitoria, al que le gustaría traer competiciones de fórmula 1. Dentro trabajan en el proyecto Hiriko, driving Mobility para desarrollar un coche eléctrico. Otras subvenciones van a asociaciones que no tienen siquiera página web, como la de 23 panaderos vascos Okindegien Ikerketa eta Garapena, que recibe medio millón de euros. Decenas de millones van a parar a proyectos absolutamente desconocidos y poco publicitados "cuyo control no va a ser fácil", insisten estas fuentes.

"Las nominativas son producto de la política de los grupos parlamentarios, y nos alegramos por el hecho de que haya algunos que incluya partidas de I+D en la mejora presupuestaria", afirma un portavoz de Ciencia e Innovación. En realidad no todas estas ayudas que aparecen con nombre propio son aportaciones de los parlamentarios, puesto que ya en la propuesta presupuestaria del Gobierno había varias nominativas asignadas de antemano al País Vasco.

El dinero público que se dedica a la investigación científica, en los países desarrollados, se asigna en procesos competitivos, buscando la eficacia de subvencionar a los mejores investigadores, y no repartiendo recursos en actividades cuyo interés o calidad no se evalúa. En España las convocatorias del Plan Nacional, a las que se pueden presentar los científicos de todas las comunidades autónomas, siguen esas reglas. El total de dinero disponible para esas convocatorias competitivas, ronda los 600 millones para este año.

Las transferencias con nombre propio en el presupuesto de 2011 no impiden a la I+D del País Vasco el presentarse a las convocatorias de financiación competitiva y obtenerlo por esta vía eficaz. Los proyectos de investigación del Plan Nacional, tras los procesos de evaluación por comités independientes del ministerio, rondan los 200.000 euros para un equipo de tamaño medio, para tres años. Los investigadores tienen que dar cuenta del gasto del dinero durante los tres años y ajustarse estrictamente a los fines para los que lo reciben.

Las cantidades de las nominativas de Ciencia e Innovación varían, pero no son despreciables en ningún caso. Además de los más de 67 millones asignados a entidades vascas en la Secretaría de Estado de Investigación, hay algunas partidas para la misma comunidad autónoma en la de secretaría de Innovación, entre las que destacan tres para la Universidad del País Vasco, por un total de 13.880.000 euros para "infraestructuras de acceso", "centro de innovación social" y "construcción de un edificio en el parque científico". A esto se añaden otros tres millones "para la unidad de biofísica", en la parte de investigación. En total, 16,8 millones de euros. La comunidad autónoma ha recortado este año en 16,1 millones de euros las subvenciones ordinarias a la UPV.

Media docena de los beneficiarios de nominativas son catalanes: Barcelona Graduate School of Economics, fundación Esade, Fundación Ascamm y la Fundación Pasqual Maragall, con cantidades que van de los 100.000 euros de esta última a los 800.000 o un millón de las otras dos.

En EE UU, las partidas de dinero asignadas a un Estado en el Parlamento a cambio de votos se llaman pork barrel, o pesebres.

Faltan fondos para el CERN

Entre los pagos que se especifican en los presupuestos de Ciencia e Innovación para este año figuran 53 millones de euros para pagar la cuota de España al Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN), junto a Ginebra, donde funciona el nuevo gran acelerador LHC. El problema es que esa institución internacional, a la que cada país contribuye proporcionalmente a su PIB, ha aprobado también sus cuentas para 2011 y a España le tocan 96 millones de francos suizos, es decir, 75 millones de euros. Sencillamente, faltan 22 millones.

Es cierto que la delegación española -y la de algún otro país- ha planteado que se pague la cuota en euros, dado que parte de las instalaciones del laboratorio están en territorio francés y no suizo, con lo que se evitarían los desfases provocados por fluctuaciones del euro respecto a la estable divisa suiza. Pero 22 millones son demasiado dinero para ajustarlo con cambio de moneda.

Por si fuera poco, España no empieza 2011 con buen pie en sus pagos al CERN, ya que del año pasado le han quedado unos 10 millones de euros por pagar, cantidad que no el Ministerio no ha precisado, a falta de cuadrar las últimas cuentas, porque el plan era destinar al pago de esta cuota los remanentes que hubiera de otros programas. Aunque al final de un año de cuentas tan apretadas se esperaba poco dinero sobrante.

Ante la perspectiva que se veía ya desde hace semanas, Ciencia e Innovación ha negociado en el CERN un plazo de tres meses (sin intereses) para pagar lo que falte de 2010. Se corre el riesgo de tener una deuda mayor aún a final de 2011 si no se remedia con alguna partida especial para hacer frente a este compromiso internacional.

Las cuentas

- El presupuesto aprobado de Ciencia e Innovación para 2011 es de 5.828 millones de euros, frente a 5.993. millones de euros en 2010, incluidos los Organismos Públicos de Investigación y la Agencia CSIC, lo que significa una caída del 2,8%.

- El capítulo de transferencias de capital, que incluye las subvenciones para los proyectos competitivos de ciencia y tecnología, los contratos Ramón y Cajal, etcétera, es este año un 6,2% inferior al pasado (de 1.409 millones de euros frente a 1.321 millones).

- Los activos financieros, quedan prácticamente igual que el año pasado, con una reducción de 0,02% (de 3.219 millones de euros en 2010 a 3.219 millones en 2011). Los préstamos, que no crean déficit a no ser que no se devuelvan, están destinados, sobre todo, a las empresas.

- El capítulo de gastos de personal se reduce un 7,6% respecto a 2010 (522 millones frente a 564 millones de euros) por el recorte de los sueldos de los funcionarios y los puestos que se quedan vacantes por jubilaciones.

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