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Detenida en Figueres una mujer acusada del asesinato de su hijo de tres años

La madre abandonó Vigo cuando un juzgado le retiró la custodia del niño

, Los Mossos d'Esquadra han detenido a María de las Nieves Domínguez, de 21 años, acusada del asesinato de su hijo de tres años, que murió el pasado 28 de diciembre en una habitación del hospital de Figueres (Girona), donde se recuperaba de una crisis asmática epiléptica. Los agentes de la policía autonómica también han detenido al compañero sentimental de la madre, José E. A., de 27 años acusado del delito de inducción al asesinato. La extraordinaria coincidencia de circunstancias hizo que la madre fuera inicialmente confundida, con María del Rosario Piñeiro, cuyo hijo de 16 meses murió también en Vigo en abril pasado a causa de una intoxicación de metadona.

El pequeño Jonathan fue ingresado en el hospital de Figueres (Griona) el día 26 aquejado de crisis epilépticas acompañadas de asma. Los médicos aplicaron un tratamiento intensivo y dos días más tarde, cuando aparentemente se recuperaba de la crisis que había motivado el ingreso, el niño fue encontrado muerto en la habitación del hospital, en la que su madre había permanecido todo el tiempo. Fue la propia madre quien dio el aviso. Los médicos acudieron inmediatamente a la habitación, pero ya no pudieron hacer nada por salvarle.Los responsables del hospital certificaron que la muerte del niño no había sido producida por causas naturales y lo comunicaron a la policía autonómica. Los Mossos dEsquadra iniciaron las investigaciones mientras el juez encargado del caso ordenaba el envío de muestras al Instituto Nacional de Toxicología de Madrid.

La madre fue detenida el pasado día 2 por la noche y su compañero sentimental, que no es el padre del niño, fue localizado en la madrugada del día siguiente. Ambos pasarán esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Figueres.

Según confirmaron ayer fuentes de la policía autonómica, la autopsia realizada al menor no aportó ninguna prueba concluyente sobre el posible asesinato. Muestras de las vísceras del pequeño fueron enviadas a un laboratorio para ser analizadas.

El resultado de estas pruebas podría haber sido determinante en la detención de la pareja. No obstante, la policía autonómica indicó ayer que la acusación de asesinato se sustenta también en otros importantes indicios.

Fuentes próximas a la investigación han explicado que la madre, natural de Vigo, abandonó esta localidad el pasado 23 de diciembre, justo el día en que recibió una notificación judicial en la que se le comunicaba la retirada de la custodia de su hijo.

Domínguez se trasladó entonces con su hijo Jonathan hasta Figueres, localidad en la que su compañero sentimental había encontrado un trabajo. Los servicios sociales de la Xunta de Galicia controlaban a María de las Nieves, Domínguez por su presunta adicción a las drogas, circunstancia que ya había motivado que le fuese retirada la custodia del niño durante las noches.

Otro hijo muerto

Desde su nacimiento, en marzo de 1994, Jonathan había pasado la mayor parte de su vida bajo la tutela de su abuela, puesto que los servicios sociales no consideraban a la madre capaz de atender correctamente a su hijo. El niño siempre presentó una salud muy frágil y había sido ingresado en el hospital Príncipe de Asturias de Pontevedra a causa de sus continuas crisis. María de las Nieves Domínguez estaba vigilada por los servicios sociales con mayor intensidad desde hacía unos meses, tras la muerte, en circunstancias poco claras, de un hermano de Jonathan. El hecho de que la madre procediera de Vigo y tuviera antecedentes como toxicómana, y de que hubiera muerto otro hijo recientemente en extrañas circunstancia, motivó que fuera confundida inicialmente con María del Rosario Piñeiro, de 37 años, cuyo hijo David, de 16 meses, ingresó cadáver en el hospital Xeral de Vigo en abril pasado después de haber ingerido metadona. En un primer momento se acusó a la madre de haber intentado envenenar a su hijo poniendo esta sustancia en el biberón, pero ella aseguró que la ingesta había sido accidental y las acusaciones no pudieron, demostrarse.

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