_
_
_
_
_

Dimiten los expertos que debían elegir al sustituto de Barbacid

El relevo de Mariano Barbacid al frente del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) se pospone hasta el 22 de junio. Así lo decidió ayer el patronato de la Fundación CNIO, que era la que debía nombrar al sustituto del investigador, que dimitió en septiembre de 2009.

El proceso se ha cobrado otra víctima: el comité de expertos encargado de elaborar el cuarteto de candidatos entre los que había que elegir al futuro director del CNIO ha dimitido. El grupo ha acusado el ambiente que existe en la institución, el Ministerio de Ciencia enfrentado a su director por su pretensión de crear una figura concreta de sociedad mercantil, una agrupación de interés económico, para investigar y, si llega el caso, explotar moléculas que actúen contra una de las dianas identificadas en un tipo de cáncer de pulmón (uno de los de peor diagnóstico).

Ciencia tiene dos informes de la Abogacía del Estado al respecto, uno antes de la aprobación de la Ley de Economía Sostenible y otro posterior, que descartan esta opción.

El comité de selección, según el ministerio, era un grupo externo (la firma Russell Reynolds) al que la comisión que debía proponer los candidatos para suceder a Barbacid, que preside Jerónimo Navas (director del Instituto de Salud Carlos III), había encargado seleccionar a los cuatro más idóneos.

De cuarteto a pareja

Este trabajo no se perderá, dijo ayer el secretario de Estado de Investigación, Felipe Pétriz, quien preside la Fundación. Pero está claro es que el proceso se ha visto afectado por el ruido alrededor de la institución, con lo que el cuarteto original de aspirantes se había quedado en la práctica convertido en una pareja, María Blasco y Eric Wagner, ambos investigadores del CNIO.

Los dos que venían de fuera (el portugués Carlos Caldas, actualmente en la universidad de Harvard, y el italiano Pier Paolo Pandolfi, en Cambridge) se habían retirado. Con ello se reducía el impacto de la selección, que perdía su carácter de captación de valores externos que el ministerio quería darle.

El objetivo del retraso es que el nombramiento se haga lejos del ruido levantado alrededor del conflicto entre Barbacid y Ciencia. Además, se da tiempo para que alguno de los dos posibles fichajes del extranjero, que eran los primeros en los informes de los expertos, se replantee la posibilidad de hacerse cargo del CNIO, si se consigue tranquilizar la situación.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_