_
_
_
_
_

Expedición científica al Alto Amazonas para analizar la resistencia de los nativos a las enfermedades más usuales

La tribu amazónica de los indios waoranis, una de las más primitivas y aisladas de todo el mundo, recibirá dentro de poco la visita de una expedición científica patrocinada por el Club de Exploradores de Nueva York, cuya bandera se ha paseado durante años por las zonas mas remotas del planeta. No padecen cáncer, ni enfermades cardíacas, ni sufren de tensión alta y viven en una sociedad sin jefes y donde el vecino alimenta al vecino.

La tribu de los waorani, que habita en el curso alto del Amazonas, zona oriental de Ecuador, no es precisamente un paraíso para los niños, según el informe de un grupo de antropólogos que han convivido con ellos. Los ajustes de cuentas, las vendettas waoranis, suponen de hecho el 45% de las muertes entre los miembros de la tribu, mientras que los fallecimientos por mordeduras de serpientes representan el 5%. de la tasa de mortalidad. Pero, el dato más escalofriante es que el infanticidio supone el 4% de las defunciones. En una suerte de ceremonia ritual, el niño que ha perdido a sus padres y no puede ser mantenido es enterrado vivo en una fosa. Mientras, los hombres escuchan pasivamente los gemidos que emergen de la tierra.Uno de los principales objetivos de esta expedición, cuyo periplo será filmado durante cinco semanas por las cámaras de la televisión británica (BBC), es el determinar la causas de la resistencia de los waoranis a las enfermedades de nuestra civilización. James Larrick, el médico que atenderá a los ocho expedicionarios, ya estudió anteriormente la vida de la tribu. Kathy Burck, experta en genética, espera poner en marcha el primer banco genético de un grupo aislado de indios.

"Estudiando las muestras de genes procedentes de los waoranis se podrán determinar por qué los miembros de esta tribu no padecen las enfermedades más comunes que se dan en las sociedades civilizadas", dijo James Larrick. "Quizá -añadió- podamos resolver de rechazo una incógnita mayor: por qué el hombre occidental padece las enfermedades que el mismo produce".

600 indivíduos

Actualmente la comunidad waorani está integrada por 600 individuos, 500 de los cuales habitan el territorio de una reserva creada por el Gobierno ecuatoriano en 1969. Un centenar de miembros de esta etnia viven habitualmente en estado puro, en las profundidades de la jungla amazónica. Este grupo es precisamente el objetivo de la expedición que parte este mes hacia el alto Amazonas. Mientras las cámaras recogen la vida cotidiana de esta primitiva tribu, los científicos recogerán testimonios y muestras de su particular cultura, incluyendo algunas de las cerbatanas de tres metros de largo utilizadas para lanzar dardos envenenados con curare.Se intentará averiguar por qué los waoranis afrontan un índice tan alto de mordeduras de serpiente. El 95% de los hombres adultos de esta comunidad han sufrido en alguna ocasión un ataque de estos reptiles, lo que podría estar relacionado, segun el doctor Yarrick, con el hecho de que es muy usual la caza pasiva, o al acecho. Esta tribu estuvo aislada del mundo hasta 1955, año en que se tuvo conocimiento de su existencia después de que mataran a cinco misioneros. Cinco años después, la esposa de uno de los fallecidos logró contactar con los waoranis y se fue a a vivir con ellos. Esta tribu sólo conoce un instrumento musical, de una sola nota, y su lenguaje es diferente al de sus vecinos. El particular infierno waorani supone volver a la tierra convertido en termita, un insecto que, según ellos, es inmortal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_