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El falso caso de las sedaciones

Montes: "El objetivo de la Comunidad era el desprestigio de la sanidad pública"

El ex coordinador de urgencias del Severo Ochoa ha charlado con los lectores de ELPAIS.com

Miguel Ángel Medina

"La crisis del Hospital Severo Ochoa fue una cortina de humo que ocultó el debate que se debía de haber establecido con los nuevos modelos de gestión, mixtos y privados, de los nuevos hospitales de la Comunidad de Madrid". Así lo ha explicado el ex coordinador de urgencias del hospital Severo Ochoa de Leganés, Luis Montes, a los lectores de ELPAIS.com.

Montes ha charlado con los internautas después de conocerse que la justicia ha archivado el caso de las supuestas sedaciones irregulares en este centro hospitalario. Para el doctor, "durante estos tres años, el Severo Ochoa ocupó el espacio de este debate y sirvió para un segundo objetivo: desprestigiar la sanidad pública".

Tras el archivo de la denuncia, "solicitamos el cese inmediato del señor Lamela, su viceconsejero, señor Canalda, su directora general de Insalud Madrid, señora Pérez, y del director general de Recursos Humanos", ha señalado. Además, ha dicho que se han iniciado "querellas de responsabilidades penales y contenciosas-administrativas", y que "se plantearán aquellas que los equipos jurídicos nos aseguren que van a prosperar".

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En cuanto al Gobierno de Esperanza Aguirre, que destituyó al propio Montes y a su equipo tras una denuncia anónima, el doctor ha dicho que no confía en que rectifiquen. "No creo que reconozcan absolutamente nada de su error. No va a haber ninguna reposición en nuestros cargos. Si me equivocase, particularmente yo no aceptaría la reposición. Para mí han perdido toda la confianza".

Al ser preguntado por la definición de "sedación irregular", el doctor ha dicho que se trata de una cuestión "difícil de contestar". "Yo no sabría contestar qué es una sedación irregular. Sedación no es una pura fórmula matemática repetible en cada paciente, cada paciente necesita sus drogas y sus dosis, según necesidades, y no hay dosis máxima ni óptima sino aquella que cesa y calma los síntomas que presenta el paciente".

Por su parte, Montes ha añadido que "con la sentencia se va a ocupar un espacio legal para el tratamiento de los síntomas al final de la vida". En su opinión, los pacientes y sus familiares no deben permitir "que se produzca objeción de conciencia u omisión en la utilización de las herramientas terapéuticas para evitar el sufrimiento. Creo que tendríamos que denunciarlo de forma particular en cada caso".

GORKA LEJARCEGI

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Sobre la firma

Miguel Ángel Medina
Escribe sobre medio ambiente, movilidad -es un apasionado de la bicicleta-, consumo y urbanismo. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense, ha ganado los premios Pobre el que no cambia su mirada y Semana Española de la Movilidad Sostenible. Ha publicado el libro ‘Madrid, preguntas y respuestas. 75 historias para descubrir la capital’.

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