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Los expertos de la OMS concluyen que el tabaquismo pasivo es causa de cáncer

El humo de los cigarrillos aumenta un 30% el riesgo de sufrir tumores de pulmón

Uno de cada cinco habitantes del planeta (unos 1.200 millones de personas) fuma, según la Organización Mundial de Salud (OMS). Pero el humo del tabaco no les perjudica sólo a ellos. Los expertos de la OMS han concluido y establecido, después de revisar más de 50 estudios científicos publicados sobre el tema durante los últimos 25 años, que el humo del tabaco causa cáncer a los fumadores pasivos. En concreto, el riesgo de padecer cáncer de pulmón aumenta en un no fumador hasta un 30% si vive en un ambiente con humo.

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'No se trata sólo de que el humo moleste'

Uno de cada dos fumadores persistentes morirá de una enfermedad relacionada con el consumo de tabaco. De ellos, la mitad fallecerá en una edad productiva (de 35 a 69 años), por lo que los fumadores que fallezcan perderán de media entre 20 y 25 años de vida comparado con los no fumadores, según la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer, un grupo de 29 expertos de 12 países que trabaja para la OMS.

Pero los perjuicios del tabaco no lo sufren sólo los fumadores, y, por extensión, sus familias. Por cada ocho consumidores de tabaco que mueren por causa de los cigarrillos, fallecerá un no fumador afectado por el humo, según un estudio de la Sociedad Estadounidense del Pulmón. El humo del tabaco está compuesto por unas 4.000 sustancias. Entre los productos que lo forman hay más de 40 agentes cancerígenos, como benzopirenos, monóxido de carbono, amoniaco y formaldehídos, y otras 400 sustancias 'venenosas', según la Agencia de la Alimentación y el Medicamento estadounidense (FDA).

Bastan dos horas

'Los no fumadores están expuestos a los mismos carcinógenos que los fumadores', de acuerdo con los especialistas de la OMS. El 15% del humo aspirado por un no fumador le llega de los pulmones de un fumador; el 85% restante, directamente de la combustión del cigarrillo. La universidad de Minnesota calcula que pasar dos horas en una habitación con una persona que fuma equivale a consumir cuatro pitillos.

El profesor de la Universidad John Hopkins de Baltimore (EE UU), Jonathan Samet, uno de los científicos que ha realizado el estudio, fue concluyente respecto al peligro del humo de segunda mano. Hay multitud de métodos 'fáciles y elegantes' para medir la presencia de agentes carcinogénicos del tabaco en los no fumadores, desde los análisis de sangre o de orina a pruebas de gases o más complicadas, afirmó Samet. 'El cuerpo humano los absorbe', explicó.

El estudio afirma que no sólo son peligrosos los cigarrillos y su humo. 'Los puros, las pipas y los bidis [cigarrillos populares en la India y cuyo consumo está en aumento en EE UU, que se envuelve en una hoja de tabaco en vez de papel] también aumentan el riesgo de cáncer de pulmón, cabeza y cuello', según los expertos.

Los resultados del estudio 'no son sorprendentes, pero sí importantes, porque vienen de la OMS y confirman lo que decimos los médicos cuando alertamos de los riesgos del tabaco para los fumadores pasivos', declaró el presidente del Comité Nacional de Tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología, Segismundo Solano.

Solano coincidió con uno de los autores del estudio, el británico Richard Doll, en el impacto para las políticas sanitarias de la declaración de la OMS. La declaración formal de que existe una relación entre el tabaco y el cáncer en los fumacores pasivos puede ayudar a casos como el de las querellas de los larengictomizados (asociaciones de enfermos de cáncer de garganta) que han denunciado a Tabacalera por su enfermedad, explicó, y ampliarlo a situaciones en que los demandantes no sean fumadores activos, sino pasivos. 'En Canadá y en Estados Unidos ya se han dictado sentencias en este sentido', recordó. El responsable de la lucha antitabaco de los neumólogos españoles destacó que 'ahora' es más importante 'todavía' la ley contra el tabaco que anunció el Ministerio de Sanidad el año pasado. Esta norma prevé ampliar la prohibición de fumar a todos los centros de trabajo, y no sólo a hospitales, escuelas y centros públicos. En el borrador de Sanidad se incluye la subvención de los tratamientos para dejar de fumar.

Solano insistió en que la solución, según este neumólogo, pasa por 'regular y limitar' los espacios donde se deja fumar, sobre todo en los centros de trabajo. 'No hay que perseguir a los fumadores. Bastante carga tienen ellos' con un hábito que no les perjudica y que muchos no consiguen erradicar, afirmó.

Un empleado de una oficina de Chicago donde está prohibido fumar lo hace fuera del edificio.
Un empleado de una oficina de Chicago donde está prohibido fumar lo hace fuera del edificio.ASSOCIATED PRESS

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