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Reportaje:

Solos y rodeados de envases

Los hogares donde vive una sola persona consumen más envases desechables y contaminan más, según un estudio

Fue Aristóteles quien dijo que el ser humano es un animal social. 24 siglos después las personas no sólo tienden a vivir en polis-ciudades cada vez más pobladas, sino que las estadísticas muestran que cada vez más gente vive sola en casa: solteros, separados, personas mayores. El estudio Alimentación 2010, que ha elaborado la fundación Instituto Cerdà para varios gobiernos de comunidades autónomas, muestra un horizonte preocupante e imposible de atisbar en la época del filósofo griego: vivir solo equivale a consumir más envases que hacerlo en grupo y, por tanto, a contaminar más.

Nada menos que 130.000 toneladas de platos preparados se generarán este año en España, según el informe de la Fundación Cerdà. El estudio recalca que si entre 1996 y 2001, el consumo en toneladas de comida en platos preparados creció el 24,4% en España, el aumento habrá sido del 44% en una década. El director del estudio, José María Marcos, recalca que es precisamente entre los hogares unipersonales donde más crece el consumo de platos preparados.

Los lotes de cuatro y seis hamburguesas se transforman en envases de dos y seis
Este año se generarán en España 130.000 toneladas de platos preparados

Todo apunta a que la tendencia a consumir comidas preparadas seguirá al alza. Los hogares donde vive una sóla persona son ya uno de cada cinco en España. Hace 20 años este porcentaje era de la mitad. En algunos países, como Suecia o Noruega, los hogares unifamiliares son el 35% del total, y en Reino Unido, llegan al 29%, según datos recogidos en el estudio procedentes del informe Food Consumption.

En Holanda, por ejemplo, el consumo anual per cápita de envases es de casi el doble en los hogares de una persona que en los de tres o más. En los hogares unipersonales holandeses se consumen 70 kilos de envases por persona y año frente a 37 en los de tres o más. La tendencia es "totalmente extrapolable a España y a todos los países desarrollados", dice Marcos.

El aumento del consumo de envases preocupa a los ecologistas. "La cantidad de basura que generan los hogares españoles ha crecido un 40% entre 1996 y 2003", según el director de Greenpeace España, Juan López de Uralde. "Estamos en 1,33 kilos de basura por persona y día, según datos de 2003, cuando en 1996 estábamos en 1,06 kilos. Todo esto tiene unos altos costes para el medio ambiente y un alto precio de reciclaje" , recalca el director de Greenpeace España.

Los expertos consultados señalan que el incremento del consumo de productos envasados tiene que ver con las nuevas formas de familia: separados, solteros y hogares con una o dos personas. Cecilia Gómez (el nombre es supuesto), una profesional que se acaba de separar y que ha pasado una corta temporada sin sus dos hijas, lo corrobora. "Estos días he comprado envases pequeños y apenas cocino. Si compras envases grandes y estas sola, al final tienes que tirar comida. En cambio, si compras tamaños pequeños acabas pagando un poco más, pero te sale a cuenta porque no tiras comida", dice esta mujer, que reconoce no ser consciente de contaminar más.

Según la última Encuesta sobre Condiciones de Vida, publicada en junio de este año por el Instituto Nacional de Estadística, los hogares unipersonales disponen, además de más dinero para gastar: 9.939 euros de media por persona y año, bastante más que los de dos personas que disponen de 9.179 y mucho más que la media del total de hogares, que es de 7.591 euros.

El mayor consumo de envases en los hogares donde sólo vive una persona se debe a su predilección por los productos de cuarta gama (por ejemplo, una ensalada limpia y cortada) y de quinta gama (unos filetes de carne o una pizza que sólo es necesario calentar). Pero el aumento de los consumidores que viven solos también está cambiando el tamaño de los envases. El surtido de hamburgesas envasadas en lotes de cuatro y seis unidades se transforma "en un surtido de dos y seis hamburguesas por lote", recalca el informe del Instituto Cerdà.

Una mujer, junto a un cubo de recogida selectiva de basura.
Una mujer, junto a un cubo de recogida selectiva de basura.J. FRANCÉS

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