_
_
_
_
_

Tortugas gigantes en el subsuelo de Madrid

La obras de ampliación del metro dejan al descubierto desde restos prehistóricos hasta antiguos sistemas de canalización de la capital

Fragmentos de caparazón de tortugas gigantes del mioceno, mastodontes del terciario o cérvidos desconocidos en la región son algunos de los restos hallados durante las obras de ampliación del Metro en la Comunidad de Madrid. Junto a estos restos, las obras han sacado a la luz otros importantes vestigios como un yacimiento del paleolítico medio -que data de hace 40.000 años-, junto a la futura estación del hospital Doce de Octubre, dentro de la prolongación de la línea 3 a Villaverde Alto.

Todos estos hallazgos han sido recogidos en el libro El patrimonio arqueológico y paleontológico en las obras de ampliación de Metro de Madrid 2003-2007, que ha sido presentado por la consejera de Transportes, Elvira Rodríguez, y la viceconsejera de Cultura y Deportes, Isabel Martínez-Cubells. Ambas consejerías han trabajado conjuntamente en los últimos dos años para sacar a la luz, durante la ampliación del suburbano, parte de la historia de lo que fue Madrid y de los que habitaron en esta región. Los descubrimientos serán expuestos en el Museo Arqueológico Regional y en el Museo Nacional de Ciencias Naturales.

Sistemas de canalización

Durante las obras se han descubierto también vestigios romanos junto a las líneas de metro ligero que llegarán a Boadilla del Monte, viajes de agua relacionados con el abastecimiento de la ciudad de Madrid en la Edad Moderna y multitud de piezas de diferentes épocas, como un canto tallado del paleolítico o un hacha de mano trabajada por las dos caras, según recordó Rodríguez. La ampliación del suburbano ha hecho posible además la excavación de buena parte de la Real Fábrica de paños que dio origen, en el siglo XVIII, a San Fernando de Henares.

Para la ciencia de la paleontología, destacan los fósiles recuperados en la Elipa, la Alameda de Osuna, Somosaguas o el entorno del estadio de atletismo de la Comunidad, con importantes hallazgos de marcovertebrados del mioceno. El polen fósil, que se extrae de los sedimentos, está aportando información, por su parte, sobre la evolución del paisaje vegetal durante el mioceno y el cuaternario. Adicionalmente, se están procesando más de 130 toneladas de sedimentos, cuyo análisis está encaminado a la recuperación y estudio de cintos de restos de microvertebrados fósiles, destacó la consejera.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_