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El Tribunal de Cuentas critica a TVE por depender de productoras privadas

En noviembre de 2005 sólo el 7% de los programas estelares de La Primera eran propios

Rosario G. Gómez

La cesión de una parte importante de la programación de TVE a las productoras privadas origina un "doble coste" a la televisión pública al mantener inactivo al personal de plantilla. Ásí lo sostiene el Tribunal de Cuentas, que en su informe correspondiente a los ejercicios 2002-2004 cuestiona la política sobre producción de programas practicada por la cadena estatal. El organismo de control precisa que de 2001 a 2004 la producción asociada y mixta -en la que participan trabajadores de la cadena y se utilizan sus medios técnicos- se redujo en 26 millones de euros (un 38% menos).

El informe de fiscalización de la gestión de personal de RTVE, que ha sido remitido por el Tribunal de Cuentas al Parlamento, cuestiona las políticas llevadas a cabo entre los años 2002 y 2004 -periodo de gobierno del PP-, pero algunas observaciones se extienden hasta 2005, ya con gobierno del PSOE. El texto censura la "utilización ineficiente de la plantilla", que conlleva la práctica de contratar programación ajena "de manera excesiva". Este sistema provoca un "doble coste" para la televisión pública, al tener que pagar por los programas comprados y, paralelamente, afrontar los salarios a sus trabajadores, aunque cada vez participen menos en las tareas de producción.

Especialmente significativa es la cesión a empresas privadas de espacios que se emiten en prime time (la franja horaria de máxima audiencia, entre las 20.30 y las 24.00). El Tribunal de Cuentas pone como ejemplo el mes de noviembre de 2005, en el cual cual sólo el 7% de los contenidos emitidos por TVE-1 (la cadena de mayor audiencia) eran propios. El porcentaje se elevó ese mismo mes al 50% en La 2, si bien esta emisora tiene una audiencia cuatro veces menor que la de La Primera.

En el periodo analizado, el Tribunal de Cuentas ha observado un sustancioso incremento de los productos adquiridos bajo la fórmula "llave en mano", es decir, aquellos programas encargados a terceros en cuya elaboración TVE no tiene ninguna participación. Este capítulo pasó de absorber 28 millones de euros en 2001 a 48 millones en 2004, Respecto a las distintas formas de producción (asociada, mixta, propia, coproducción), los espacios "llave en mano" coparon el 26% del total, frente al 15% de 2001.

Simultáneamente, TVE redujo notablemente (del 33% de los recursos totales al 23%) la producción mixta; es decir, aquellos contenidos que realiza junto a empresas privadas y con empresas privadas. Igualmente, cayó en picado la producción asociada (aquellos espacios encargados a otras empresas en los que TVE aporta medios técnicos y humanos), que pasó de siete millones de euros a cantidades residuales.

61 productoras

El Tribunal de Cuentas pone de manifiesto un incremento en el número de productoras contratadas por TVE, que pasó de 44 en el ejercicio 2002 a 61 en 2004. Aunque el informe no lo cita, algunas de las productoras más beneficiadas en esos años fueron Cartel y El Mundo TV, filial audiovisual de El Mundo.

Al analizar la política de producción de programas, el Tribunal de Cuentas recomienda que TVE realice "la producción propia interna de cuantos programas sea posible" dentro de una mejora de la relación "calidad-coste". En cuanto a los contenidos que TVE encarga a otras empresas (a través por ejemplo de coproducciones, en las que participan cadenas o compañías audiovisuales extranjeras) propone que estos encargos se hagan atendiendo a "los compromisos de producción independiente" y siempre bajo el requisito de que cuenten con "buenas posibilidades de reemisión y buenas perspectivas de venta posterior en los mercados audiovisuales".

El órgano fiscalizador se hace eco las recomendaciones que fueron formuladas por el comité de sabios encargado de elaborar la reforma de RTVE y recomienda que se adopten "las medidas precisas" para controlar los gastos destinados al personal contratado, dado "su notable incremento". Aquel consejo de expertos, presidido por el filósofo Emilio Lledó, subrayaba el problema histórico de la utilización de los recursos humanos de TVE.

Otro factor que han repercutido en la producción es el exceso de categorías profesionales (101, según establecía el convenio colectivo), lo que ha provocado "rigidez organizativa" e innumerables conflictos judiciales. En 2004 el número de categorías se redujo a 46. Respecto a los medios técnicos, que abarcan desde los platós de televisión a las unidades móviles, el informe precisa que TVE no ha utilizado su potencial, como pone de relieve "el bajo número" de horas de producción propia: alrededor de 3.000, excluyendo deportes y programas informativos.

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