Tres linces en libertad dan a luz en Doñana en el mismo lugar donde se soltó a uno de Sierra Morena

Todo indica que Baya, el lince ibérico procedente de Sierra Morena soltado en Doñana con el fin de aparearse con hembras del parque nacional, ha hecho los deberes. Tres ejemplares del paraje de Coto del Rey, el mismo en que se liberó al macho, han dado a luz en las últimas semanas. Se trata de Wari, Rayuela y Viciosa, tres hembras cuyos partos suponen un rayo de esperanza para la supervivencia del lince ibérico, el felino más amenazado del planeta. Como mínimo han nacido cuatro ejemplares (tres en un parto, uno en otro y del tercero la Junta de Andalucía no tenía ayer cifras). En los próximos días se quiere someter a los cachorros a las pruebas de paternidad, si bien todo indica que al menos una de las camadas sea hija de Baya.

Los nacimientos suponen, asimismo, un hito, al tratarse de los primeros que se producen en libertad tras el cruce entre ejemplares de Doñana y uno de Sierra Morena. La idea de trasladar a Baya desde su área natural serrana a Doñana se debió al programa de reforzamiento de la especie emprendido dentro del Proyecto Life. Los linces de Doñana, cuyo número ronda los 35 y 40, están sometidos a muchos riesgos. Debido a su exigua cantidad, uno de los principales peligros es la endogamia y la consiguiente debilidad genética frente a enfermedades.

El pasado verano los científicos se llevaron un terrible susto al certificar un brote de leucemia felina el parque. La enfermedad dejó sin machos el área de Coto del Rey. En total, la zona perdió once ejemplares, entre los infectados que fueron trasladados de allí y los individuos que murieron. Se hacía evidente que, una vez erradicada la enfermedad, era preciso un reforzamiento de la especie.

Por ello, después de que la Unión Europea diese luz verde, durante el mes de diciembre se liberó en Doñana al primero de los ejemplares de la zona de Cardeña y Andújar, en Sierra Morena, Baya.

Esta iniciativa pionera en la conservación del felino está resultando muy satisfactoria, pues los técnicos encargados del seguimiento de los linces en Doñana han comprobado numerosas interacciones de Baya, con las tres hembras que ahora han parido.

Los nacimientos en libertad complementan los esfuerzos que por la pervivencia de la especie se lleva a cabo desde el Programa de Cría en Cautividad emprendido en el centro de El Acebuche. Durante el mes de marzo nacieron cinco cachorros de dos hembras distintas, Saliega y Brisa. Desgraciadamente dos ejemplares murieron. Una de las tres crías de Saliega fue rechazado por su madre y terminó falleciendo, mientras que Saliega parió prematuramente a sus dos hijos, uno de los cuales murió y el otro fue también rechazado.

Estos son los primeros partos que se producen este año en El Acebuche. La presente campaña reproductora del Programa de Cría en Cautividad cuenta con 11 hembras en edad fértil. Ocho están en El Acebuche, dos en el zoológico de Jerez (Cádiz) y una en La Aliseda (Jaén), donde también viven siete hembras subadultas.