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Un economista alemán publicó trabajos basados en plagios durante 15 años

Hans Werner Gottinger, un economista alemán de 63 años, especializado en análisis matemáticos aplicados al medioambiente, lleva varias décadas publicando en revistas académicas trabajos plagiados, al menos en parte, de otros ya publicados sin ser descubierto. Su caso ha merecido la atención de la revista Nature, pero los expertos reconocen que los casos de plagio pueden ser mucho más frecuentes en el ámbito de las ciencias sociales de lo que se conoce.

Gottinger, que ha cambiado muchas veces de institución de trabajo y ha dado a menudo referencias falsas, ha negado cualquier responsabilidad, pero las pruebas se acumulan contra él. La revista Research Policy ha retirado esta semana un artículo de Gottinger publicado en 1993 que analizaba la demanda de tecnologías derivadas de la Iniciativa de Defensa Estratégica impulsada por Ronald Reagan. Ha resultado ser igual que un artículo de otro economista, Frank Bass, publicado en 1980 en la revista Journal of Business. Una investigación posterior realizada por la primera revista halló que, en 1999, la revista Kyklos ya había retirado otro artículo de 1992 de Gottinger por el mismo problema sin que tuviera consecuencias en su carrera. Más recientemente, un trabajo sobre un modelo económico del calentamiento global publicado por el economista alemán en 2002 ha resultado ser sospechosamente parecido a otro publicado en 1997 por otro economista, Zhiqi Chen. En total, Gottinger ha publicado en 30 años 100 artículos en revistas prestigiosas en su área, que fueron analizados por otros expertos antes de su publicación.

Al investigar su trayectoria académica, Nature se ha encontrado con estancias que a menudo terminaron mal

en varias universidades e institutos alemanes, pero también con otras de varios años en centros internacionales de varios países, como Reino Unido, Suecia y Japón, que no han querido aclarar detalles de su empleo en ellas. Lo más curioso es que desde 1988 Gottinger, cuando presentaba un trabajo para su publicación, lo firmaba falsamente como perteneciente a la Universidad de Maastricht, en Holanda, que sólo recientemente ha reaccionado pidiéndole que no utilice su nombre.

Auxilio informático

Gottinger casi siempre era el único autor de los estudios, pero también ha trabajado con al menos un colega, en artículos que parecen no haber sido plagiados. Era considerado un solitario.

Para luchar contra la epidemia académica del plagio, que también está en alza en la investigación científica, 2.046 editores se han puesto de acuerdo para abrir sus bases de datos a un programa informático llamado CrossCheck, que alertará sobre similitudes excesivas con los textos presentados para su publicación. La prueba piloto de CrossCheck empezó el 1 de agosto y en ella participan, entre otros, el gigante editorial Elsevier y el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de EE UU.

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