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Un experimento con ratones desvela la base cerebral de la ansiedad

Las personas que sufren de ansiedad tienden a interpretar las situaciones ambiguas, que pueden ser peligrosas pero no lo son necesariamente, como situaciones amenazadoras, lo que les activa el mecanismo del miedo. Investigadores del Laboratorio Europeo de Biolología Molecular han descubierto, en experimentos realizados en ratones, la base neurológica de este comportamiento.

En la revista Neuroscience señalan que un receptor para el neurotransmisor serotonina y un circuito neuronal relacionado con la región cerebral del hipocampo desempeñan un papel crucial en las respuestas de miedo en situaciones ambiguas.

Un ratón que ha aprendido que un cierto estímulo es siempre sucedido por una descarga eléctrica, llega a asociar los dos y se queda paralizado por el miedo cuando aparece el primero, incluso si el segundo nunca sucede. En la vida real, la situación no es siempre tan clara, explican los investigadores; muchas veces, el estímulo no es seguido por la descarga u otra consecuencia desagradable, y los ratones muestran menos miedo hacia estos estímulos ambiguos que a los claramente amenazadores.

Un equipo de investigadores liderado por Cornelius Groos ha descubierto que para esta respuesta no exagerada es necesario un receptor específico para la serotonina, una sustancia utilizada por muchas células cerebrales para comunicarse. Los ratones que no tienen este receptor tienen problemas para procesar los estímulos ambiguos y reaccionan ante ellos con respuestas claras de miedo. La causa es que están mal conectadas sus células cerebrales desde su desarrollo fetal e infantil, debido a la falta de este receptor.

Reacción exagerada

"En los humanos, se ha comprobado que la transmisión mediante serotonina está implicada en desórdenes como la depresión y la ansiedad, y estos pacientes también reaccionan exageradamente ante situaciones ambiguas", ha señalado Gross. "El siguiente paso es identificar las regiones cerebrales responsables de este comportamiento complejo de miedo y del proceso de estímulos ambiguos".

Y los científicos encontraron que, al cerrar una determinada ruta nerviosa en el hipocampo, desaparecieron las reacciones de miedo a los estímulos ambiguos.

"Esta ruta debe de estar implicada en el proceso y evaluación de los estímulos. Parece empujar a los ratones a interpretar las situaciones como amenazadoras", explica Theodoros Tsetsenis, otro investigador del equipo.

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