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Un juego de reflejos

El fotógrafo Mikel Bastida expone en Bilbao - La muestra está organizada por los colegios de abogados de España y Unicef

Mikel Bastida no decidió hasta los 19 años dedicarse a la fotografía. Ahora tiene 28 y acaba de ganar el segundo premio, de entre 1.000 instantáneas presentadas, de un concurso organizado por el Consejo General de la Abogacía Española y respaldado por Unicef. Del certamen además nació una exposición A 1,20 metros: los derechos de la infancia desde su altura. Becado por la escuela de fotografía Efti, su último proyecto, le ha llevado hasta China dónde, según explica, su trabajo dio un giro.

Antes de la experiencia asiática surgió Sueño rebelde, la instantánea que junto a otras 39 se expone hasta el 14 de octubre en la Fnac de Bilbao y que luego viajará a Vitoria y San Sebastián. Comparte espacio con el ganador del concurso, Josep López y con otras 18 personas que se presentaron al certamen. Junto a estas instantáneas se entremezclan los trabajos de otros 20 profesionales ya consolidados como Cristina García Rodero, Enrique Meneses, José Cendón y Ouka Leele.

En la muestra se intercalan instantáneas de García Rodero y Ouka Leele
Las fotografías de Mikel Bastida explican la realidad a través de la ficción

La fotografía de Bastida muestra a un niño, en un barrio popular de Santiago de Cuba durante el 50º aniversario de la Revolución Cubana. "El niño, cansado, ensimismado, se apoya en un coche", explica su autor. El resto de la imagen la completa un juego de reflejos que se proyecta en la ventanilla del automóvil y que "deja abierto el mensaje, el significado de la fotografía", señala. La imagen forma parte de una serie de 25, "el resto no tienen nada que ver con la infancia", explica su autor, que se presentó al concurso al ver que su imagen entraba dentro de los requisitos exigidos.

"Intento compaginar la fotografía comercial con proyectos personales", aclara Bastida, sentando de espaldas a la instantánea con la que se ha presentado al concurso. Comenzó estudiando en la Escuela de Cine de Andoain, donde empezó a sentirse atraído por la fotografía, luego vinieron trabajos como cámara de televisión para informativos, hasta que decidió matricularse en Comunicación Audiovisual. Desde entonces no ha parado de viajar intentando hacerse un hueco en el panorama de la fotografía documental. Su tiempo se divide entre estar detrás de un objetivo y la busqueda de becas y concursos con los que poder financiar sus proyectos.

Tras la experiencia cubana el fotografo bilbaíno, como relata, decidió imprimir en sus proyectos un cariz "personal, que también reflejasen mi forma de ser. China fue una ruptura, quería hacer algo con lo que me sintiese identificado". Tras dos meses y medio de trabajo el resultado fue una serie de 12 fotografías, Conciencias desplazadas, con las que ha intentado reflejar los cambios vertiginosos que vive el país.

Ahora Bastida trabaja en un nuevo proyecto, del que prefiere no hablar mucho, "es un reto que me está llevando por toda Europa y que tardaré unos dos años en finalizarlo", subraya.

El fotógrafo bibaíno Mikel Bastida junto a las imágenes que se muestran en la Fnac de Bilbao.
El fotógrafo bibaíno Mikel Bastida junto a las imágenes que se muestran en la Fnac de Bilbao.SANTOS CIRILO

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