Cuatro miembros de Greenpeace abordan un carbonero en Gijón
La organización ecologista denuncia los efectos que produce la quema de este producto y la dependencia enérgetica de España
Cuatro activistas de Greenpeace han abordado la pasada madrugada en Gijón el buque Windsor Adventure, cargado con 54.000 toneladas de carbón procedente de Colombia para protestar contra los efectos que la quema de este mineral tiene sobre el cambio climático. Mientras los miembros de la organización ecologista se han colgado del buque, otros compañeros han pintado en el casco de la embarcación, de 190 m de eslora Y 15 metros de calado, el lema Abandonemos el carbón.
Greenpeace, que presenta hoy el informe El carbón en España, un futuro negro, señala a este producto como responsable de la grave dependencia energética de España y de su enorme responsabilidad con el calentamiento global del que España es víctima y partícipe. "España, como miembro de la Unión Europea, es el último en Kioto y el cuarto consumidor de carbón. Esta negra clasificación retrata la eficiencia de las políticas utilizadas", según Raquel Montón, responsable de la campaña de Cambio Climático y Energía de Greenpeace.
