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Una mujer muere apuñalada pese a contar con orden de protección

La víctima, de Sevilla, había rechazado el uso de un dispositivo de alarma

Noelia Pérez Rivero, de 33 años y con un hijo de nueve, murió ayer tras 24 horas de agonía. Fue apuñalada en el cuello, en el tórax y en la mano en un barrio desfavorecido de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) por su ex pareja, Mariano L. T., de 34 años, quien quebrantó la orden de alejamiento. Noelia había rechazado 15 días antes un dispositivo de alarma que le ofreció la policía. El supuesto autor del crimen se entregó la noche del martes.

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Noelia es la novena víctima mortal por violencia doméstica en España en lo que va de año. Su caso responde a un patrón que por desgracia se repite con demasiada frecuencia: malos tratos reiterados que la mujer perdona con la esperanza de que no se repitan.

Noelia contó con dos órdenes de protección que incluían el alejamiento de su agresor. En noviembre, cuando se tramitaba una denuncia por lesiones, amenazas y maltrato habitual, compareció en el Juzgado número 3 de Alcalá de Guadaíra solicitando el levantamiento de la orden porque se había reanudado la convivencia. También pidió que se archivara la denuncia, pero la fiscalía y la juez mantuvieron los cargos.

Esta instrucción no se tramitó al juzgado de lo penal para celebración del juicio porque el acusado no había sido localizado. Fue encontrado el día 31 de enero en Alcalá de Guadaíra, el mismo día en que se le notifica la nueva orden de alejamiento, motivada por una nueva denuncia de la mujer contra él por amenazas con armas y lesiones. Noelia, no obstante, rechazó el servicio de teleasistencia, un dispositivo que activa una alarma en la policía con sólo pulsar un botón.

Tres puñaladas

Noelia Pérez murió a las 13.15 de ayer en la UCI del hospital de Valme de Sevilla, adonde había llegado 24 horas antes con un "shock hemorrágico". El apuñalamiento se produjo a las 13.10 del martes en la principal vía del barrio de Rabesa de Alcalá de Guadaíra. Estaba parada junto a un quiosco. Mariano L. T. se bajó de un coche, asestó tres puñaladas a la mujer y huyó. Se entregó horas más tarde en la comisaría del barrio de la Macarena de la capital andaluza, donde permanecerá hasta que pase hoy a disposición del Juzgado de Instrucción de Alcalá de Guadaíra.

El mismo día del suceso, la policía buscaba al supuesto agresor porque debía comparecer en comisaría por otros delitos.

"Mi hija no ha sido la primera, ya había pegado a tres o cuatro mujeres que ha tenido antes", declaró a Efe el padre de la víctima, Francisco Pérez, quien añadió que Noelia retiraba las denuncias porque éste la amenazaba con matarla e "incluso con quitarle a su hijo".

Su hermano Marcos aseguró que Mariano L.T. merodeaba todas las noches con su coche por el vecindario de Noelia, a lo que el padre añadió que llegaba incluso a disfrazarse para no ser reconocido. Aseguró, además, que hace unas semanas su hija sufrió una embolia que, según le dijo el médico, "podía estar causada por los puñetazos que le pegaba en la cabeza". Otro familiar afirmó que el agresor tenía el crimen planeado y que cuando se encontró con el cuchillo frente a su víctima exclamó: "Aquí te quería ver yo". La familia ha decidido donar los órganos de la mujer. El funeral se oficiará hoy al mediodía en la parroquia de San Agustín de Alcalá de Guadaíra.

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