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Reportaje:

¿Por qué nadie vigilaba a El Rafita?

La libertad sin control de un joven asesino reabre el debate de la Ley del Menor

Nadie vigila a Rafael Fernández, El Rafita, uno de los jóvenes que asesinaron a la menor Sandra Palo en 2003. Pese a que sigue en libertad vigilada hasta junio, ni Instituciones Penitenciarias ni la Comunidad de Madrid se ponen de acuerdo sobre quién debe controlar al joven de 21 años, que ha cometido tres delitos en los últimos seis meses, el último, un intento de robo el sábado pasado. El caso ha reabierto el debate sobre la reforma de la Ley del Menor.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, reiteró ayer que es necesario reformarla y eludió cualquier responsabilidad de su Gobierno sobre El Rafita. También pide reforma Movimiento contra la Intolerancia. Su presidente, Esteban Ibarra, considera que medidas como la libertad vigilada sólo suponen citas puntuales con especialistas que no garantizan una reinserción. "El último episodio de El Rafita demuestra que no es eficaz", señaló ayer Ibarra.

Por contra, un grupo de fiscales y expertos en derecho juvenil preparan un memorando en el que se llega a la conclusión de que la legislación penal del menor no es tan benigna como se piensa, sino que puede llegar a ser más dura que la aplicada a los mayores.

El Rafita está en libertad vigilada desde 2007. En septiembre, la Comunidad de Madrid reclamó pasar el control a Instituciones Penitenciarias "por la especial gravedad" del caso, según una portavoz de la Consejería de Justicia. El joven vivió un tiempo en Andalucía en pisos tutelados pero, en verano, se escapó dos veces para volver a Madrid a ver a su familia. Y además, estuvo implicado en el robo de un portátil.

El 24 de noviembre, un auto del Juzgado de Menores pasaba el testigo del control a Instituciones Penitenciarias, que pidió aclaraciones a la Comunidad al entender que las medidas de la Ley del Menor no son, en principio, de su competencia. La Comunidad se ciñó al auto que Instituciones no recurrió. Ninguna de las dos Administraciones volvió a interesarse por El Rafita, al que el sábado sorprendieron intentando forzar un coche.

Rafael Fernández,<i> El Rafita. </i>
Rafael Fernández, El Rafita.

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