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El sacerdote Goddard tiene novio formal

Giles Goddard es un cura anglicano gay que preside el movimiento Iglesia Inclusiva. Lleva diez años al frente de la parroquia de San Pedro, en Walworth, en el sureste de Londres. La mitad de la congregación son nigerianos, muchos de Sierra Leona, y entre los feligreses blancos los hay muy conservadores y muy liberales. Pero Goddard asegura que conviven todas las tendencias sin problemas.

Tampoco su sexualidad ha sido un problema para los feligreses a pesar de que mantiene una relación con un hombre que aún no ha llegado al nivel de pareja civil, la ley que permite a los homosexuales legalizar su relación sin llegar al matrimonio, porque cree que la relación aún no es lo bastante madura. Pero, si llega esa madurez, lo harán.

Goddard no quiere entrar en el delicado asunto de si es o no una relación casta. "La Iglesia dice que espera que los clérigos sean castos en sus relaciones, pero de hecho la gente no lo es. Podría contestar esa pregunta, pero no lo hago porque no tiene que ver con la Iglesia", explica.

¿Por qué la Iglesia de Inglaterra acepta que los curas tengan relaciones con mujeres y, aunque acepta la pareja homosexual, no admite que haya sexo? "Para los laicos, esa regla no afecta. Básicamente, la Iglesia aún no ha asumido las implicaciones de sus posiciones. Hay conservadores dentro de la Iglesia que mantienen una visión particular del matrimonio y en su día se tuvieron en cuenta sus posiciones sobre el celibato. Pero en los próximos años eso desaparecerá porque la Iglesia evoluciona aprendiendo de la sociedad y refleja muchos tipos de relaciones. Y es importante que la gente pueda expresar su amor por otros de forma sexual".

Los conservadores se aferran a menudo a la Biblia para condenar la homosexualidad. Los liberales responden que la Biblia hay que entenderla en cada momento histórico y no se puede picotear de un versículo a otro e ignorar el contexto en que fueron escritos los evangelios.

"Hace 200 años la Iglesia creía en el derecho a tener esclavos y se basaban en la Biblia para justificarlo. Hoy la Iglesia está contra la esclavitud. Eso significa que su posición no se basa en las escrituras. En África tenemos problemas de corrupción y de pobreza y esperamos que nuestros obispos hablen de esas cosas en lugar de estar hablando de sexualidad. Pero lo hacen porque ésta es una agenda política que está siendo impulsada por los conservadores occidentales", denuncia Davis Mac-Iyalla, un anglicano laico de Nigeria, ahora exiliado en Togo por vivir abiertamente su homosexualidad y que estos días está en Londres para asistir al sínodo y seguir la Conferencia de Lambeth.

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