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Alerta sanitaria

"La situación es muy seria pero con elementos tranquilizadores"

Dos virólogos del CSIC aseguran que es aún demasiado pronto para determinar el índice de mortalidad del H1N1 (gripe porcina) en humanos, pero que la situación es preocupante

El buen tiempo (altas temperaturas) puede ser un aliado para reducir el riesgo de transmisión del nuevo virus de gripe porcina, en la que se ha registrado contagios entre humanos en México y EE UU. "Estos virus suelen ser estacionales y estamos en primavera, cuando los días son más largos y hay más luz; estos virus suelen ser sensibles a los rayos ultravioleta que los inactivan", asegura Luis Enjuanes, virólogo del Centro Nacional de Biotecnología, del CSIC.

Enjuanes califica la situación como "muy seria", pero añade que hay "elementos tranquilizantes" para enfrentarse al virus de la gripe porcina que afecta a humanos. En primer lugar "la naturaleza del virus hace que se pueda diagnosticar en cuestión de horas"; segundo, el virus es "sensible a medicamentos que están disponibles en cantidades relativamente altas porque los gobiernos hicieron acopio de los mismos cuando la crisis del H5N1 (gripe aviar) amenazó con extenderse"; y tercero, si el buen tiempo puede ayudar a la inactivación del patógeno, "el factor estacional, la altas temperaturas, también es un aliado porque se ventilan más tanto las viviendas como locales públicos, lo que reduce la posibilidad de transmisión".

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En cuanto a las características del virus H1N1 hasta ahora conocidas, Enjuanes señala que contiene "secuencias del virus de la gripe del pollo, de la gripe porcina, y de virus de la gripe humanos, pero no se conoce el potencia patogénico que tiene".

Juan Ortín, virólogo del mismo centro y experto en virus influenza, señala que hasta el momento es "muy precipitado hablar de mortalidad, ya que no se conocen todos los casos, y tampoco se sabe seguro si todas las muertes conocidas han sido causadas por la gripe".

Una característica que está mostrando la epidemia es que parece afectar más a personas jóvenes, cuando lo normal es que las gripes afecten a niños y personas mayores, al tener las defensas más bajas. "No se sabe aún por qué sucede esto", señala Ortín, "pero también pasó esto con la gripe de 1918 y hasta el momento no se ha conocido la razón. Es un dato que hay que tener en cuenta, pero hay que esperar".

Sin conocer aún la potencial mortalidad del virus, Enjuanes puntualiza que "lo preocupante del nuevo virus de la gripe es la facilidad con la que se transmite por el aire y el hecho de que la infección se transmita entre personas, el daño potencial que el virus puede causar es elevado". Ahora, también sería muy importante conocer la distribución del virus en la cabaña porcina mexicana, dado que ahí puede estar el foco de infección.

"Pero de momento no se conocen con exactitud las características del virus, o por lo menos no se han hecho públicas, por lo que es muy difícil hablar de diferencias y similitudes con otras gripes", advierte Ortín. "Lo mismo podemos decir de las consecuencias, no podemos aventurarnos". Se están conociendo datos de muertes, "pero es muy precipitado sacar conclusiones sobre la mortalidad del patógeno ya que no se conocen aún todos los casos ni se sabe si todas las muertes registradas han sido de hecho causadas por esta nueva gripe, así que habrá que esperar para hablar de mortalidad", añade este especialista.

Las medidas a tomar, son "de sentido común", insiste este especialista: "Identificar los casos, aislarlos y controlar a las personas que han estado cerca. Es la rutina y es lo que se está haciendo".

Imagen coloreada del virus A H1N1 tomada por un microscopio electrónico de un brote de 1976 y difundida por el Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU.
Imagen coloreada del virus A H1N1 tomada por un microscopio electrónico de un brote de 1976 y difundida por el Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU.REUTERS

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