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Diez autoridades de protección de datos envían una carta de queja a Google

España suscribe el documento en el que se critica el desprecio por las normas que protegen la privacidad

Diez agencias de protección de datos, entre ellas la española, han dirigido una carta a Google en la que piden que respete las normas de privacidad cuando lance nuevos productos. La carta está dirigida al máximo responsable de la compañía, Eric Schmidt, y en ella expresan su "profunda inquietud" por los "problemas suscitados por el reciente lanzamiento" de su red social Google Buzz, "sin las adecuadas garantías para la privacidad". El texto está firmado por las autoridades de protección de datos de España (Artemi Rallo), Canadá, Irlanda, Reino Unido, Italia, Alemania, Nueva Zelanda, Francia, Países Bajos e Israel.

Según ha explicado un portavoz de la agencia española a este diario, el documento se ha gestado en la reunión que mantienen en Washington más de 1.500 expertos y autoridades sobre el problema de la salvaguarda de los datos personales en el entorno digital.

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Carta a Google

Las autoridades firmantes se muestran preocupadas porque, demasiado a menudo, el derecho a la privacidad de los ciudadanos se está olvidando en el despliegue de las nuevas aplicaciones tecnológicas de Google. Consideran que la forma en que se ha llevado a cabo el despliegue de la aplicación Google Buzz "ha conllevado un decepcionante desprecio" por normas fundamentales sobre la privacidad.

La carta recuerda que no es éste el primer conflicto de este tipo con Google y citan los contenciosos abiertos con Google Street View, que se presentó en algunos países "sin la debida consideración por las leyes de protección de datos y privacidad". Las autoridades recuerdan que cuando el servicio de correo electrónico Gmail se fusionó con un nuevo servicio de red social (Google Buzz) se asignaba automáticamente a los usuarios una red de seguidores entre las personas con las que mantenían correspondencia. Y ello se hizo "sin informar adecuadamente sobre cómo podía controlar y gestionar el internauta el servicio. Google se disculpó e introdujocambios para solventar las críticas. En la carta se admite que Google no es el único caso preocupante, pero le reclaman dar ejemplo "como líder del sector de Internet".

Carta de Granada

Por otra parte, expertos en privacidad y 25 autoridades dedicadas a la protección de los datos digitales han aprobado en Granada las líneas principales de un catálogo de derechos básicos de la privacidad en el mundo digital. La Carta de Granada de derechos a la privacidad en el mundo digital será remitida a todas las autoridades de protección de datos para su revisión y a expertos para su aprobación final en un plazo de seis semanas. Según una nota de la agencia española, "la finalidad de este documento es configurar un instrumento de referencia tanto para la estandarización de las garantías de privacidad, como para los debates en otros ámbitos, y sentar las bases de un marco en el que se incluya la obligación de respetar los derechos en el mundo digital". El texto fijará los principios básicos y obligaciones que deben regir y ser respetadas tanto por los usuarios -como responsables de los contenidos que publican sobre ellos mismos y sobre otras personas- como por proveedores y autoridades públicas, para conciliar el libre flujo de información, con la garantía de los derechos de privacidad y protección de los datos de las personas.

"En relación con los usuarios, el documento impondrá el deber de ser singularmente diligentes a la hora de evitar suministrar información de terceras personas", según la nota. El documento reconocerá el derecho a utilizar los servicios de manera anónima o bajo un seudónimo y a controlar la cantidad de información personal facilitada y los usos que se le pueden dar a la misma. También impondrá obligaciones de transparencia y claridad a los proveedores de servicios y precisa que "la información recopilada sobre los usuarios debe ser la mínima que se necesite para prestar un servicio". Finalmente, en relación a las autoridades públicas "establece la necesidad de que éstas impulsen la formación para que todas las generaciones puedan acceder a las destrezas necesarias y poder participar plenamente en la era de la comunicación digital; hacer valer y defender los derechos de los usuarios y el derecho a la privacidad en este ámbito"

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