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Entrevista:CAFÉ CON... FRED GITNER

"Las bibliotecas cambian vidas, y, a veces, las salvan"

Tereixa Constenla

A pocos metros de la embajada hay otra legación informal, oficiosa, de Estados Unidos: un café de la cadena Starbucks donde, entre las diez y once de la mañana, suenan casi indistintamente conversaciones en español y en inglés. Territorio amigo para cualquier estadounidense de paso. En este lugar, el neoyorquino Fred Gitner se ha reencontrado con su té negro predilecto -Darjeeling- como si no hubiera sobrevolado el Atlántico. Cosas de la globalización. Uno puede salir de casa sin el lujo de añorarla. Uno puede tomar el mismo té en Queens que en la madrileña calle de Serrano

Gitner coordina el programa Nuevos Americanos en la biblioteca de Queens

Gitner, 56 años, neoyorquino de tercera generación, vino a España para hablar de la biblioteca de Queens en dos ciudades -Granada y Barcelona- donde los inmigrantes de tercera generación están a la vuelta de la esquina. El Queens de hoy se asemeja a la Alejandría de ayer. Un lugar de mestizaje con una biblioteca simbólica. En la ciudad fundada por Alejandro Magno convivieron macedonios, romanos, egipcios, griegos y judíos, cuyos saberes guardaba la mítica biblioteca. Al distrito neoyorquino han ido llegando en las últimas cuatro décadas alemanes, griegos, italianos, chinos, haitianos, venezolanos, coreanos y oriundos de 190 países. Es el corazón étnico de Estados Unidos.

En un entorno así, una biblioteca al uso estaba condenada a languidecer. Hace 30 años, los bibliotecarios miraron alrededor y descubrieron que su nueva parroquia era heterogénea, multilingüística, exótica. Se adaptaron apoyándose en el análisis y la participación. "Se hizo hablando con las comunidades para descubrir sus necesidades". Así nació el programa Nuevos Americanos, que coordina ahora Fred Gitner.

Para desmenuzarlo se ayuda de unos folletos de colorines escritos en español, chino mandarín, coreano, bengalí o ruso. Los despliega sobre la mesa. Es un catálogo para sobrevivir en un hábitat desconocido: "Cómo encontrar trabajo en Estados Unidos". "Qué necesita saber para ayudar a sus hijos en el colegio". "Aprenda a prepararse para las emergencias". "Cómo protegerse de estafas hipotecarias". "Cómo puede ver al médico si no tiene seguro de salud".

Conforme avanza en su exposición, la biblioteca va ampliando su identidad y asumiendo la de centro de orientación laboral, escuela de idiomas, espacio escénico y asesoría sociosanitaria. "En Estados Unidos, en muchas comunidades la biblioteca es el centro cívico y cultural".

Su capacidad de adaptarse a los nuevos residentes ha convertido la biblioteca de Queens (una central y 61 comunitarias) en la de mayor circulación de Estados Unidos: 21 millones de materiales en 2007. "Parte de esto se debe a las colecciones en diferentes lenguas que la gente puede encontrar, gastamos el 10% del presupuesto en comprar materiales en 70 idiomas extranjeros".

El programa Nuevos Americanos ha permitido incluso detectar enfermedades. "Decimos que las bibliotecas cambian vidas, ahora podemos decir que también las salvan". Gitner es heredero de la cultura de bienvenida. Cuando sus abuelos ucranios llegaron en 1920 a Nueva York, la ciudad tenía nueve escuelas con un lugar para que los nuevos americanos aprendiesen inglés.

Fred Gitner.
Fred Gitner.ÁLVARO GARCÍA

Starbucks Serrano. Madrid

- Zumo de naranja, 2,80

- Capuchino, 2,70

- Té Darjeeling, 2,60

- Tarta de manzana, 2,80

Total con IVA: 10,90 euros

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Sobre la firma

Tereixa Constenla
Corresponsal de EL PAÍS en Lisboa desde julio de 2021. En los últimos años ha sido jefa de sección en Cultura, redactora en Babelia y reportera en Andalucía. Es autora del libro 'Cuaderno de urgencias'.

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