Sin ellos no

Hace algunos años leí un interesante reportaje sobre el tormento añadido que la vejez podía suponer para los homosexuales: los asilos de ancianos no admitían parejas gais y muchas personas se vieron obligadas a separarse para siempre de sus compañeros de toda la vida, justo cuando esa vida se hacía más necesitada y más precaria. La ley del matrimonio homosexual ha venido a solucionar también esto, lo cual no es un detalle baladí.
Recordé de algún modo esta historia hace unos días, viendo un programa de televisión en un hotel latinoamericano. Era un documental inglés y entrevistaban a una octogenaria de rostro arrugado, cabellos desbaratados y ropas muy modestas, pero que se expresaba con total lucidez y precisión. Ya no podía seguir viviendo sola e iba a ser trasladada a un asilo de ancianos; pero para ello tendría que abandonar a sus dos perritos, unos animales canijos, greñudos y mestizos que se apretujaban contra la mujer como dos bolas de pelo temblorosas. A saber cuál sería el destino previsto para los pobres bichos; en cuanto a la anciana, la separación suponía la pérdida de sus seres más queridos. "Si me quitan a mis perros, no quiero vivir. He estado reuniendo pastillas. Primero se las daré a ellos y luego me mataré yo". Lo decía con perfecta contención británica, sin melodramatismo ni aspavientos. No pude terminar de ver el documental y no sé qué fue de la mujer, pero no consigo olvidar su desolación. Me temo que muchos pensarán que suicidarse por un perro es de chiflados, pero sé que otros entenderán la absoluta indefensión de esos ancianos que se ven obligados a abandonar a quienes son en realidad su única familia. Esa mutilación afectiva, esa soledad y ese desgarro. Es una tragedia, doblemente trágica por incomprendida. Sé que es complicado, pero, ¿no podría haber asilos que admitan animales?
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Archivado En
Últimas noticias
MTV cierra siete de sus canales de televisión en Europa y España en plena reestructuración de Paramount
Carlos Alcaraz rompe con Ferrero tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos, nuevas aventuras y nuevos proyectos”
Putin considera que Occidente reacciona con “histeria” por instar a prepararse para la guerra contra Rusia
Sánchez critica el “error histórico de Europa” con los coches de combustión
Lo más visto
- Elon Musk, más cerca de ser el primer hombre en alcanzar una fortuna de un billón de dólares
- El rechazo de Francia y las dudas de último minuto de Italia amenazan con descarrilar la firma del acuerdo entre la UE y Mercosur
- La UCO precipitó la detención del expresidente de la SEPI porque se percató de que lo seguían cuando iba a una cita con Leire Díez
- Interior nombra jefe de la UCO al coronel Pedro Merino, exintegrante de la unidad y que estuvo destinado en La Zarzuela y Seguridad Nacional
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano




























































