_
_
_
_
_
Entrevista:ALMUERZO CON... MOHAMED ALÍ ABTAHÍ

"Me hice 'blogger' porque hay mucho que contar en Irán"

Ángeles Espinosa

Este clérigo sonriente y afable es todo un personaje en Irán. Vicepresidente con Mohamed Jatamí (1997-2005) y reformista convencido, Mohamed Alí Abtahí (Mashhad, 1959) es el pionero de los bloggers iraníes. Hace cuatro años, cuando las bitácoras electrónicas apenas habían echado a andar en el mundo, él irrumpió en la red con un sorprendente "el que escribe es Mohamed Alí Abtahí, no el vicepresidente de Irán" (webneveshteha.com).

Además, no sólo era miembro del Gobierno, sino también hoyatoleslam, un rango por debajo de la dignidad chií de ayatolá. A muchos no les gustó su idea.

El ex vicepresidente de Irán mantiene un blog con 25.000 visitas diarias

"Sentía que había muchas cosas que quería contar, pero que no podía hacerlo desde una perspectiva oficial", explica ahora ufano de los 35 millones de visitas que ha recibido, casi 25.000 diarias. "No he faltado a mi cita ni un solo día", subraya, "ni siquiera cuando tras defender a los bloggers encarcelados (en 2004) atacaron mi sitio y tuve que buscar un host fuera de Irán". Poco ha cambiado desde entonces. Hace apenas unos días, Abtahí volvía a salir en defensa de otro blogger enviado a prisión por el contenido de su página.

"No me eche mal de ojo", responde con su humor habitual cuando le pregunto si no teme nuevas represalias. Admite que juega con ventaja. "Conozco muy bien la política de Irán, ya me he hecho muy famoso y también sé dónde están los límites de lo que se puede y no se puede decir", señala. "Tengo cuidado con el lenguaje que uso", añade con un guiño. Asegura que el Gobierno conservador intenta quitar importancia a su blog haciendo como que nadie le presta atención, aunque está convencido de que le leen todos los ministros. Lo deduce de las críticas que se cuelan entre el medio centenar de correos que recibe cada día o de las diatribas de los fundamentalistas. Mientras los más conservadores le acusan de irreverente y de revelar contenido de reuniones privadas, para algunos jóvenes se muestra demasiado moderado.

Pero incluso para Abtahí existen límites, y cuando EL PAÍS le propuso este almuerzo para celebrar el cuarto aniversario de su blog, lo arregló para que tuviera lugar en su despacho del Instituto para el Diálogo Interreligioso. Aunque no lo dijo explícitamente, hubiera resultado poco apropiado que alguno de sus enemigos le sorprendiera en un restaurante de moda junto a una periodista extranjera. Tal vez por la misma razón, pidió que estuviera la traductora, Nushin Alipour, aunque se defiende en inglés.

Así que el tête-à-tête se convirtió en un ménage-à-trois. Eso sí, de lo más casto. El hoyatoleslam se sentó a un lado de la mesa y sus invitadas enfrente. La comida fue frugal para los estándares iraníes, uno de esos menús que se encargan a mediodía en las oficinas de Teherán. Y Abtahí apenas picoteó un poco de ensalada y de kebab. No nos atrevimos a preguntar si estaba a dieta. Desde aquella primera incursión del hoyatoleslam en la web, los blogs se han convertido en un verdadero fenómeno social en Irán. Hay más de 80.000, y aunque muchos sean diarios de adolescentes sin mayor interés, también abundan los políticos, culturales o feministas. "Tenga en cuenta que Irán es un país muy joven y a la vez hay dificultades para expresarse por otras vías," afirma Abtahí.

Instituto para el Diálogo Interreligioso. Teherán

- Tres ensaladas

- Tres kebab mixtos (pollo y cordero) con arroz

- Tres coca-colas

Cortesía del hoyatoleslam

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_